BAD BOY 7

26.5K 3K 865
                                    

Aquella mañana la cafetería de la escuela se encontraba casi vacía a comparación de otros días.

Jungkook permanecía sentado en una mesa al fondo de la misma, en realidad no le agradaba ser el centro de atención ni tener miradas puestas en él, así que agradeció la falta de estudiantes aquella mañana, o de lo contrario tendría que lidiar con murmullos, dedos apuntándole, secretos y miradas de terror. Prefería ese ambiente más tranquilo.

Paseó la vista por el lugar y finalmente fijó sus ojos en la comida, la cual picó una vez más e hizo una mueca de asco. Por lo regular él no consumía los alimentos de la cafetería, sin embargo no tuvo tiempo de comprar algo fuera y lo único que pudo conseguir fue un espagueti mal cocinado, carne mal cocida y un puré de papa que más bien parecía engrudo.

Suspiró rendido y alejó el plato para simplemente coger una roja manzana que era lo único decente en aquella comida.

Estaba por dar el primer mordisco cuando de pronto unos tenis rosas aparecieron en su campo de visión. Extrañado, levantó la mirada y entonces su corazón golpeó fuertemente su pecho queriendo escapar nuevamente como hacía unas noches atrás.

-Hmm... Hola.- saludó Jimin nervioso mientras miraba hacia el suelo.

-Hola- respondió el azabache dándose cuenta de que el menor traía cargando la chamarra que le había prestado el día de la fiesta.

-Yo... Vine a devolverte ésto- extendió la prenda y sonrió tímidamente, causando una revoltura en el estómago contrario.

-Gracias.

-G-Gracias a ti por prestármela. Por ti fue que no pesqué un resfriado.

Jeon sonrió de lado y colocó la chamarra junto a él. Después desvío la mirada hacia su manzana para volver a acercarla a su boca, sin embargo notó que Jimin aún seguía parado ahí junto a él.

-¿Ocurre algo?- cuestionó un poco confundido volviendo a poner sus ojos en el bonito y sonrojado rostro del menor.

Park jugueteó con las puntas de sus pies y después apartó el flequillo que cubría parte de su ojo con la punta de sus dedos y un suave movimiento de cabeza, algo que por poco hace que Jungkook se atragante con su propia saliva.

-Me... Me preguntaba si puedo comer contigo... ¡Si no te molesta, claro!

Jungkook lo miró inexpresivo, aunque por dentro un torbellino de emociones le recorría rápidamente haciendo que se sintiera totalmente desorientado ¿Por qué Jimin querría acercarse a él en público? ¿A caso no sabía que podría atraer malas miradas?

-¿Me estás pidiendo permiso?

-Bueno...

-¿Qué pasa si digo que no?- y Jimin se quedó callado para después desviar la mirada. No entendía porqué Jungkook se comportaba diferente ahora, y la razón era que quería alejarlo, después de todo los rumores siempre iban detrás de él y no quería que Jimin sufriera lo mismo, pero el chico no le hacía la tarea sencilla a su corazón, pues al ver esa cara simplemente dijo secamente—. Eres libre de sentarte donde quieras.

Y Jungkook creyó que con eso el peli rosa decistiría de la idea. No fue así.

Jimin caminó hasta poder sentarse frente a él, quien aún seguía sin comprender algo.

—¿Por qué me hablas?

Jimin lo miró confundido y ladeó la cabeza.

—No entiendo.

—Nadie se acerca a mi, me tienen miedo ¿Por qué tú no?

—¿Debería?— preguntó con una sonrisa— No me has hecho nada para que te tenga miedo, al contrario, solamente has hecho cosas lindas por mi.

BAD BOY || KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora