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Un resguardo: es algo que los Mafiosos sólo pueden tener el privilegio de tener. Es un antiguo y sagrado cumplimiento de familia, gracias a la Ruska Romana. Nadie más que las grandes familias de mafias de cada país puede otorgar dicho privilegio.

Kao y Jungkook al ser de familia de Mafiosos grandes tienen la marca del dragón en sus espaldas, una promesa más grande que la de sangre porque incluso si la la riegas y eres excomulgado esto te puede salvar la vida.

Incluso si la orden suprema viene por ti.

Kao no era tonto y le enseño su resguardo a su hermanastro, era su única esperanza.

─Tengo mi resguardo, tienes que ayudarme. Por favor.

Jungkook miro el miedo en aquellos ojos negros, su voz lo convencía de que era verdad sus palabras y acciones. Las consecuencias de darle la espalda a tu familia eran graves, tal cómo él lo hizo y tal como lo hace su hermanastro.

─Amor dame unos minutos, iré a desayunar con ustedes cuando termine, prepara la mesa para ellos también. ─Le dice a su esposo y Jimin sólo asiente. Sabía que algo malo pasaba, lo podía mirar en Kao y su esposo.

─Si amor.

─Earth ve con él por favor necesito hablar con mi hermano a solas.

El nombrado le mira con temor.

─¿Estarás bien? ─dice preocupado.

El toma su mano besando su dorso, eso lo calma un poco.

-Lo estaré, sólo ve con él.

Earth no muy convencido sale con Jimin a su lado, el venir aquí a dónde todo empezó le daba algo de miedo e inseguridad, su esposo y él corren peligro mucho porque Salieri está detrás de ellos. Se sentía muy mal únicamente quería poder tener una vida tranquila al lado de su esposo, tener una familia y vivir en un sitio bonito.

Esas cosas no pasan para él. Ni a nadie que tenga que ver con la mafia.

─Tranquilo ellos sabrán arreglarlo ─tranquiliza Jimin al más bajo.

─Lo sé, sólo que tengo miedo, es mi esposo y su cabeza cuesta ahora un millón por él y por mi. Todos los asesinos están buscándonos, no es fácil.

Llegan a la cocina y Jimin deja a la pequeña Sadie en su sillita, a Earth la mira fascinado. Mira la jarra de té para ofrecerle un poco.

─¿Es tuya? ─Inquiere curioso al ver a la niña.

─La adoptamos ayer en nuestra boda. Fue una larga historia de cómo llegó a nuestra vida. ─Resume un poco.

─Es preciosa y tiene tu color de ojos. ─acaricio su mejilla y la pequeña le sonríe.

─Gracias. ─sirve un poco de Té y le deja la taza mientras él toma el suyo. ─¿Cómo es eso de que un millón por los dos?.

Bebe su Té algo más tranquilo pero al menos aquí estarán a salvo.

─Lo que pasa es que, bueno no se si sepas pero; cuando un Mafioso de familia es traicionado por su propia familia, la familia puede decirle al continental que está excomulgado. Es decir que está fuera de su protección.

─No sabía eso, bueno creo que a medias.

─Don Salieri nos excomulgó, nosotros no sabíamos y todos mafiosos y asesinos vinieron por nuestra cabeza en lo que llegamos aquí, trataron de matarnos y cuando supimos que nuestras cabezas valían un millón temíamos morir.

Otras de las cosas que le sorprendía al rubio de la Mafia era quién sabe cuántas reglas más haya en esta cadena de reglas tontas, pero si ese resguardo valía mucho que su propio esposo aceptó ayudar a su hermanastro al que le disparó, debe ser muy importante.

𝗠𝗔𝗙𝗜𝗔 🍷𝗸.𝗺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora