Pasa su lengua por toda la trayectoria con helado. Dejando un rastro húmedo en mi rostro. Me ruborizo de pies a cabeza por lo íntimo del acto. Él solo sonríe inocente.
- No hagas eso - lo reprendo.
Su sonrisa aumenta al doble mostrando sus intensos...
Intento mover mis labios sobre los de ella esperando recibir respuesta de su parte pero no la obtengo. Detengo el proceso y junto su frente a la mía absorbiendo su calor. El característico olor a tulipanes que emana su pelo termina con mi cordura. Trata de apartarse y la retengo justo donde está. Las personas bailan a nuestro alrededor ajenas a nuestra situación. La siento temblar entre mis manos y me aparto por fin dándole un poco de espacio.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Nuestras miradas se cruzan y lo que veo en la de ella me petrifica en el lugar. Sus ojos son un mar negro terrorífico. Y entonces se que haber ocultado la verdad es más grave de lo que pensé. La seguridad que refleja impacta más duro de lo que imaginé.
- Es la última vez que me tocas - dice firme y no hay señal en su rostro que refleje sentimiento alguno. Solo veo vacío y la máscara de carne y hueso que lleva no muestra el más mínimo dolor.
- Tenemos que hablar - digo, ahora más inseguro.
En su cara se forma una sonrisa siniestra de boca cerrada. Dejando por fin un poco de emoción en ella, pero es fingida, muestra alegría cruda que no llega a sus ojos.
Intento dar un paso hacia ella, pero me arrepiento al instante y decido no empeorar las cosas.
- Fui muy clara con mi mensaje o también eres tan estúpido como para no entender lo que significa la palabra acabó.
- Vamos a otro lugar - tomo su mano y la abofetea.
- Te dije que no me toques - replica rabiosa.
- Está bien, no te tocaré pero dame cinco minutos de tu tiempo para explicarte todo y si después de eso quieres que me aleje de ti - suspiro y ella espera atenta a mis palabras - Te dejaré en paz.
No me responde y pasa por mi lado sin mirarme. La sigo y veo que se dirige a una de las zonas VIP donde la música apenas se escucha y estamos prácticamente solos. Subimos las escaleras y la veo tomar asiento, me ubico frente a ella con la suficiente distancia para no incomodarla.
- De una vez te digo que no me interesan las excusas por las que te acercaste a mi. Ya lo sé todo. Mi padre te contrató para ser mi guardaespaldas - hace una pausa y continúa - eso lo puedo entender hasta cierto punto, él suele ser muy protector para conmigo. Pero que te hayas acercado a mi por lástima u órdenes suyas es lo más bajo que he visto en mi vida.
Analizo cada una de sus palabras, se que tiene razón en lo que dice pero... espera... ¿acaba de decir que me acerqué a ella por órdenes de su padre?
- Estás muy equivocada si crees eso en verdad.
- No se que esperas Mauro, pero me da igual lo que pasó. No creas que estoy sufriendo porque no es así. No eres nada para mi, solo me estaba divirtiendo contigo.
