Querido diario:
Últimamente he estado actuando raro y lo sé porque Emma me lo hizo saber.
Como las clases con ella no terminan hasta el ultimo examen, hemos estado estudiando hasta ahora. No hemos hablado sobre la salida al parque de atracciones, ella solo lo nombró en un momento en que Joshua no dejaba de quejarse de la materia de educación física y Emma se burló diciendo que lloriqueaba más que esos niños que vimos juntos en el parque.
Eso llevó a que Joshua se sienta curioso y básicamente me exigió que le contara todos los detalles de la salida, y lo hice. Pero eso tal vez sea lo siguiente que escriba.
Ahora, la situación con mi padre no avanzó para nada bueno, pero afortunadamente tampoco empeoró. Mi madre me conto que esa vez que la golpeó fue por que ella le exigió que se fuera, le hizo saber lo horrible que fue para ella conocerlo. Eso encendió la furia en el hombre que, como la bestia que es, decidió descargarse dándole un golpe en la cara.
Se sintió horrible saber aquello y no poder hacer nada al respecto.
La preocupación y el enojo hacen que me sienta nervioso todo el tiempo, eso fue lo que Emma notó. Cuando escribía en la hoja comencé a recordar todo lo que mi padre nos hizo, aunque no quería pensar en aquello no podía evitar hacerlo. Hasta que Emma me tomó la mano en la que estaba sosteniendo fuertemente el lápiz, me miró con curiosidad y me preguntó si estaba bien.
Le dije que sí, pero al parecer no me creyó porque me habló hasta que logré olvidarme por un momento de mi padre y todo lo que me preocupa. Emma logró eso y aun estoy sorprendido.
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Diario de un chico solitario
Teen FictionDaniel Jefferson siempre había sido muy solitario, no le gustaba la compañía de nadie. Y aunque había cierto chico que decía ser su amigo, no lo era. Él no quería ni necesitaba amigos. Su madre y su hermana no entendían porqué había adoptado esa fo...
