Maestro de la Muerte || Harry Potter

LXIX

"Enséñame a ser animago" Fue lo primero que escucho de Draco dos semanas después cuando despertaron, era desconcertante

"¿Animago? ¿Estas consciente de que ni siquiera yo lo soy?" Un Harry recién despierto era malo, muy malo para pelear

"Entonces seamos animagos juntos, Potter. ¿Estas consciente de lo mucho que podría servirnos?"

Una mueca apareció en el rostro de Harry, no era una mala idea, de hecho, así ambos tendrían rutas de escape si algo malo llegara a pasar, pero no estaba seguro de como seria el cambio, sabia lo que se debía hacer para llegar a serlo gracias a Sirius, pero no quería tanto trabajo

"Es un proceso largo ¿De verdad quieres hacerlo?" Pregunto Harry, ya estaba un poco mas despierto, ahora su cerebro si funcionaba, ser una animago no era una tarea sencilla, podía durar meses

"Si no quisiera no te lo estaría preguntando" Harry rodo los ojos, Draco nunca dejaría de ser... Draco

"Entonces iré a buscar dos hojas de mandrágora... debemos dejarla dentro de nuestras bocas por un mes" La mueca de Draco lo hizo detenerse "¿Qué? ¿No querías ser animago?" Pregunto divertido, pero el golpe en su espalda lo hizo detener la pequeña risa que dejaba libre

Harry no quería moverse, estaba muy cómodo acostado con Draco ¡Era domingo! Él no quería levantarse de la cama un domingo

"Bien, bien, iré a buscar las malditas hojas" Susurro al mismo tiempo en que se sentaba en la cama y se estiraba, un tempus demostró que ni siquiera era hora del almuerzo, los domingos siempre salía hasta la tarde de la cama

"Las cosas que hago por ti Dragón" Fue el susurro que Draco escucho antes de quedar solo en la habitación, ya estaba acostumbrado a las desapariciones de Harry

Draco sonrió con triunfo, estaba decidido a ser un animago y él esperaba que su forma animal fuera de ayuda para Harry, él no quería dejarlo solo y existían muchos lugares a los cuales como un humano no podía acompañar a su gatito

Cuando Harry volvió Draco estaba en el baño, listo para una ducha rápida y cepillando sus dientes, Malfoy notaba perfectamente como el rostro de Harry seguía dormido perezoso fue lo que pensó, observando también las pequeñas hojas en su mano

"¿De verdad tenemos que tener eso en nuestras bocas?"

Harry volteo, sus ojos detallaron rápidamente a Draco antes de asentir, últimamente se fijaba mucho en la figura de Malfoy

"Un mes completo, tienes suerte de que hoy sea luna llena, no la puedes sacar nunca de tu boca y si la pasas por error tendrás que volver a empezar" Informo antes de bostezar, últimamente Harry salía al bosque en las noches, buscando información de los dementores o de los Thestral, había notado como las reliquias actuaban frente a esos seres y quería respuestas

Draco asintió, tomando la hoja de él con el ceño un poco fruncido, el cual desapareció cuando sintió los dedos de Harry en medio de sus cejas, lo molestaba mucho con eso diciéndole que le saldrían arrugas

"¿Listo Dragón?" Pregunto cuando obtuvo la mirada del rubio, quería reír por lo tierno que se veía Draco, siempre que hacia lo mismo terminaba con un sonrojo

"Nací listo" Dijo rápidamente antes de meter la hoja en su boca, Harry le siguió de inmediato después de reír

Ambos estaban seguros que seria un mes algo complicado

Mantener la hoja en su lugar fue mas complicado de lo que Draco creía, el tuvo que luchar mucho para que no saliera de su boca o para no pasarla por error mientras comía ¡Y Harry lo hacia todo como antes! ¡Hasta podía hablar sin dificultad!