soft addiction; kth [editando]

∞ C h a p t e r 9 ∞

Taehyung

Sí, definitivamente Chaeyoung era alguien muy peculiar. No entendía nada de ella, pero seguía sintiéndome curioso.
No la conocía, no sabía nada de su vida pero extrañamente tenía el sentimiento de entenderla y coincidir con ella. Debía estar volviéndome loco.

Me resultaba graciosa y desconcertante su actitud; parecía estar molesta con el mundo y especialmente conmigo, no quería hablarme o siquiera verme, sin embargo, sus impenetrables paredes parecieron caerse en un segundo cuando vio a ese perro o cuando veía fascinada a esos chicos correr en las motocicletas.
Ella sonrió de una manera hermosa y lucía tan feliz como nunca imaginé ver a alguien.
Me había acercado a ella por la relación única que parecía tener con Jungkook, sin embargo, ahora me sentía más intrigado por ella que por Jeon.
No la entendía, pero me estaba haciendo sentir mucho.

Salimos de la calle en la que acababan de terminar las carreras.
Seguía sus pasos pero me detuve cuando ella se frenó de pronto y volteó a verme.

—Hasta aquí.

Parpadeé sin entender de lo que hablaba.

—¿Qué?

—Ya ha terminado, aquí nos separamos—respondió con obviedad.

—¿Aquí? Podría acompañarte a tu casa—le sonreí. —Seguramente Jungkook me mataría si algo te pasa.

Soltó una risa sarcástica.

—Sí, y seguramente contigo seré la chica más segura del mundo. Olvídalo, Kim—rodó los ojos.

—Pero–

—Ya, ocúpate de tus propios asuntos. No tengo idea de lo que hayas pensado o la razón por la que viniste aquí conmigo, pero sólo te aclararé que no tengo ningún interés en volver a relacionarme contigo y que en definitiva no me agradas. Lo sabes, ¿verdad?

Reí un poco.

—Sí, ya lo has dejado en claro, no te preocupes.

Asintió.

—Adiós entonces.

Sin dejarme decirle alguna otra cosa, se alejó con pasos rápidos de mí.
Sin entender nada me volteé dispuesto a irme también, sin embargo, me detuve al ver algo interponiéndose en mi camino.

—¿Tú? ¿Qué estás haciendo aquí?

Me agaché y observé al cachorro.
Era el mismo que Chaeyoung había estado acariciando en todo momento mientras habíamos estado en ese lugar.
Probablemente nos había seguido cuando salimos.

El animal se movía con lo que parecía desesperación y ladraba suavemente con tristeza.
Sus ojos me observaron y sin dudarlo se acercó a mis manos.

—¿Qué pasa? ¿La extrañas?

Pasé una mano por su pelaje y él continuó casi llorando.
Presentía que era por Chaeyoung, porque antes él estaba tan feliz con ella.

—Amigo, ella dijo que no podía llevarte.

Alzó sus ojos y nunca pensé que sería observado de esa manera. Sentí su anhelo, esperanza e ilusión en sus orbes y me quedé sin palabras.

—No puedo creer que vaya a hacer esto—hablé para mí mismo.

Tomé al perro entre mis brazos y volví a caminar.
No tenía idea alguna de animales y probablemente a mi hermano no le agradaría la idea de tenerlo en casa, pero ya estaba decidido a llevarlo conmigo.
De todas formas, la mayoría de mis decisiones en la vida las tomaba sin pensar, obligado o simplemente por impulso, y la que tomé en ese momento parecía ser por mí, por el pobre animal y, extrañamente, por aquella rubia que había conocido ese mismo día.

✨✨✨

Hola, déjenme sus comentarios y votos que son tan valiosos.
Besos♡