嚣张
Xiao zhang
Unbridled
Sinopsis:
Lin Wuyu es el dios académico de su escuela secundaria: tranquilo, confiado y siempre capaz de obtener el primer lugar sin esfuerzo. Ding Ji hace alarde de su excelente memoria y se especializa en el arte de engañar...
"¿Quieres que te lleve a ver las estrellas?" Ding Ji señalo hacia arriba.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Lin Wuyu no estaba acostumbrado a comer en una casa ajena. Es decir, no estaba acostumbrado a comer con una familia, con ancianos y niños, sin importar qué tipo de familia sea.
Incluso no estaba dispuesto a ir a la casa de Xu Tianbo. Ya que esa es la forma en cómo creció. A excepción de la familia de Lao Lin, nunca antes ha comido en casas de sus compañeros de clases o amigos. Incluso, cuando fue a casa de Lao Lin y no a la de sus compañeros, no hubo gran diferencia, porque Lao Lin también estaba solo.
Hoy, él también estaba un poco solo
Aunque accedió a venir a cenar a la casa de Ding Ji.
Comenzó a sentir esa soledad cuando salió de la sala de examen.
Ya sea que les vaya bien en el examen o no. Ya sea que regrese primero a la escuela o se vayan directamente a casa. Los estudiantes que estaban a su alrededor, siempre terminaban yendo a casa a cenar.
No quedaría nadie en el dormitorio.
Esta sensación de vacío era completamente distinto a estar solo un fin de semana.
De pronto, se dio cuenta que su vida en la escuela secundaria se había acabado.
Que solitario.
Si Ding Ji no lo hubiera invitado a comer, probablemente no habría vuelto al dormitorio después de ir a casa e ir a buscar sus cosas. Se habría ido a un hotel para pasar la noche y relajarse.
Xu Tianbo le envió un mensaje hace una hora y preguntándole dónde estaba esta noche. Y solo lo vio, después de destrozar el pepino.
- Regresa al dormitorio después de ir a cenar con tus amigos.
- Tengo algo que decirte, quiero ser libre estos días.
- Entonces se libre
- ¡Como un niño pequeño!
- No juegues conmigo tan grandemente.
Lin Wuyu sonrió y se guardó el teléfono en el bolsillo. Miró la operación de Ding Ji, donde varias especias de pepinos se volvieron de un color negro: —No te dio vergüenza decirme que estaba haciendo pepinos encurtidos y ¿tú no solo estás haciendo pepinos encurtidos picados?
Ding Ji vaciló mientras sostenía la botella de aceite de sésamo: —¿Quieres medir tú el aceite de sésamo? creo que este olor es demasiado fuerte ahora.
—Que así sea —dijo Lin Wuyu— Hay demasiado en esa botella, ¿por qué no viertes un poco en un plato y lo mides?
—Que inteligente —Ding Ji asintió con la cabeza. Tomando un plato, yendo al fregadero y luego lo vertió con cuidado, junto con la salsa de soja y vinagre.
