Solo Por Ti

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Después le doy una ultima ojeada, pero quería aprovechar que tengo wifi para subirlo😌. Lxs quiero🥰

Instagram: b4by_giirl

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Dedicado a jannina_cabrera gracias por el apoyo💜

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No sentí la conexión que me había acostumbrado a sentir, no sentí las fuertes manos de Alex tomando mi cadera, no lo sentí.

Nada se sentía como estar con él.

Nada se sentía tan bien como estar con él.

Y eso me frustró.

Besé con más ansias a Cristina, queriendo sacar a Alex de mi mente de una buena vez. Estaba exhausta de pensar. No quería pensar en lo que estaba sucediendo con Cristina, no quería pensar en lo que sucedería con Sofía, no quería pensar en nada. Así que dejé que mis emociones hicieran lo que quisieran conmigo; cualquier cosa para olvidarlo aunque sea por un momento. Por lo que, cada vez que en mi cabeza aparecía el recuerdo de unos ojos negros como la noche o de una sonrisa ladeada, besaba con más ímpetu a la morocha.

Cristina tomó mi rostro entre sus manos, profundizando el beso con las mimas ganas que yo. No me cuestioné su accionar y bajé mis manos a su cintura, atrayéndola a mí. Me separé apenas para poder tomar aire mientras descendía, dejando un camino de besos por su mandíbula hasta llegar a su cuello, donde di una lamida a lo largo; jadeó. Nos besamos por un buen tiempo y cuando una de sus manos bajó de mi rostro lentamente por mi cuello, acariciándolo en el proceso, y se detuvo en mis pechos tuve un momento de lucidez:

Había besado a Cristina. Cristina me estaba besando. Nos estábamos besando. La estaba usando para distraerme y no estaba bien.

No merecía que Alex me hubiese ocultado la verdad tanto como la morocha no merecía que me desquitara con ella. Me aparté de Cristina de golpe, poniendo unos pasos de distancia entre nosotras. Nuestras respiraciones eran acelerada y la miré a los ojos sorprendida, avergonzada y conflictuada. Sus mejillas estaban sonrosadas, sus labios hinchados y sus pupilas dilatadas.

Se veía atractiva.

Abrí la boca para decir algo, ¿qué cosa? No estaba segura. Quería decir que lo sentía, sin embargo, no sabría qué tan honesta estaría siendo, porque sí, no obstante lamentaba estarla usando, no sabía si me arrepentía de besarla. En aquel momento mi cabeza estaba hecha un lío, ya no estaba segura de nada.

Y, de pronto, quise llorar. No tenía ni puta idea de lo que estaba haciendo ni de lo que debía hacer.

Joder, estaba perdida.

El enfado se había esfumado para dejar un fuerte dolor en el pecho, era como la resaca luego de una larga noche de tragos. Había caído tan profundo por Alex que ahora no sabía cómo salir del pozo.

—Yo... —Tragué duro y clavé la vista en el suelo.

¿Qué acababa de pasar? ¿Por qué no se había apartado? ¿Sabía lo de Alex? ¿Qué diría Sofía? ¿Por qué no podía dejar de pensar?

Mordí mi labio con fuerza.

—No digas nada—me interrumpió Cristina y se acercó otra vez a mí, tomó mi barbilla y me obligó a mirarla a los ojos. Tras un segundo, comenzó a acortar la distancia entre nosotras.

¿Y si ella lo sabía? ¿Y si se estaba burlando de mí, otra pobre ilusa que caía por el increíble Alex Tronser? ¿Y si fue plan de ellos desde un comienzo que yo cayera por él? ¿Cómo podía confiar en Cristina? ¿Cómo podía confiar en alguien de aquel colegio?