Capítulo 10: Vulnerabilidad

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Había tratado de seguir con su vida después de la salida de la noche pasada, se acercaba Halloween así que debía pensar en cómo asustar a Kai y Kouki.

También se había resignado a ignorar a los de la ToMan, más que nada porque sus únicas amigas se relacionaban directamente con ellos.

Luego estaba Baji, quien había empezado a merodear por su zona, lo había pillado cuando volvía del parque con Kouki y Kai, los pequeños al verlo se escondieron detrás de ella.

-¿Qué haces aquí? -preguntó tomando la manita de Kouki, quién lentamente salía detrás de sus piernas y miraba al pelinegro con cierta fascinación.

Lúan se agachó hasta la altura de ambos y sonrió

-¿Por qué no saludan al tío Keisuke?

-O-oi...

Kouki fue el primero en dar el primer paso y tomar un extremo de su camiseta, ella se dio cuenta que no traía la polera de la Toman encima, tampoco traía su uniforme.

-¡Soy Kouki y tengo 5 años! ¡Mi hermano tiene 10 y vivimos ahí! -señaló con sus manitas hacía su casa.

-Mostrar donde viven... qué descuidados.

Lúan había llevado su mano a su bolsillo de la chaqueta por instinto al escuchar una voz desconocida detrás de ellos, el gas pimienta ganaría tiempo para cargar a los niños y ponerlos a salvo.

Había optado por llevarlo consigo ya que era la mejor opción de defensa sin emplear violencia de por medio.

-¿K-kazutora?

Relajo la tensión de sus hombros al verlo con aquel peinado horrible de siempre, más aretes en sus orejas y una mirada parecida a la de Baji cuando incendiaba autos.

-Ha pasado mucho, Lú. ¿Ya se lo contaste, Baji?

Ella frunció el ceño.

-Dejé la ToMan.

Parpadeo con sorpresa, debía estar bromeando.

Pero luego algo hizo click en su cabeza, no creía que solo fuese debido a la influencia de Kazutora. No. Ella conocía la verdadera personalidad de Baji, lo había visto correr incontables veces al parque con comida para gatos, incluso pedirle ayuda con los estudios porque no quería ver a su madre llorar. Lúan y Baji se volvieron muy cercanos después de que Emma los presentara en el dojo.

No había ni un solo recuerdo de su estadía en Tokyo donde él no estuviese. Aunque al principio le cayó muy mal, se las arreglaron para no matarse, llegando a tener un vínculo mucho más estrecho. Siempre fueron Baji, Emma y ella.

-Tora, ¿hace cuánto saliste? -preguntó tirando suavemente de la mano de Kouki.

El otro pelinegro la vio sin comprender el por qué tenía toda su atención

-Hace unos días -contestó confundido.

-¿Por qué no nos avisaste? -le regañó, aunque se quedó callada luego de darse cuenta que ella había hecho exactamente lo mismo, evitar contactar a los demás-, olvídalo. Trata de no meterte en más problemas, ¿está bien?

-Oi, ¿no me dirás nada? -escuchó reclamar a Baji-, te dije que dejé la ToMan.

Lúan asintió

-¿Esperas que te regañe? ¿Tora quiere ver cómo te suplico que regreses con ellos? Porque no se me ocurre nada más para explicar que me estés diciendo esto. Dejaste en claro que no formo parte de la ToMan, no debería importarme lo que suceda internamente. Tú y yo no cambiaremos nuestra relación así te hayas peleado con ellos porque su pandilla no podría importarme menos.

El resurgir del fénix | Manjiro x OC |Where stories live. Discover now