El resurgir del fénix | Manjiro x OC |

2. 11 Black Dragons (primera parte)

Takemichi venía del futuro.

Justo cuando creía que su vida tomaba un rumbo tranquilo... algo sucedía y alteraba todo a su alrededor.

Aproximadamente un par de meses después del funeral de South, Lúan había empezado la universidad con normalidad.

Asistía a cursos del horario regular, tomaba un par de talleres extracurriculares, pasaba los ratos viendo cómo sus profesores realizaban operaciones en vivo. En alguna que otra ocasión le tocaba ver cómo alumnos por egresar ayudaban en las operaciones. Era fascinante.

Todo parecía relativamente normal para una estudiante de medicina que lidiaba con sesiones privadas con una psicóloga.

Mucho por estudiar y tratar de no suprimir o minimizar lo que le sucedía. Por primera vez sentía que estaba tomando el camino correcto.

Al menos hasta que Takemichi la interceptó en su casa un día domingo con una expresión decidida. Las vendas y sus muletas habían desaparecido.

Lúan no pudo ni preguntarle cómo estaba, ya que no lo había visto hace meses, él solo le había soltado semejante disparate.

"Vengo del futuro"

Se había reído, sí. Era una reacción normal cuando el chico que siempre conociste llega de imprevisto y afirma venir de un futuro horrible a salvar el día.

¿El problema?

Él no mentía.

Al principio lo tomó con gracia, pero después de ver cómo él no parecía seguir el juego Lúan se calló.

Lo escuchó por horas, Takemichi le contó cómo había empezado y cómo terminó en cada viaje que realizó.

Se encontró a sí misma recordando la conversación que había tenía con su hermana cuando había caído en coma, le había mencionado sobre una línea temporal inestable, y el responsable estaba justo frente suyo. Contándole como había tratado de detener las muertes y accidentes con un pésimo resultado.

Ella se dio cuenta de cierto vacío en sus pupilas cada vez que menciona a personas que ya no se encontraban vivas.

No puede ser...

-¿C-comó...? ¿Cómo funciona?

Él le explicó brevemente cómo viajaba en el tiempo y Lúan vio sus manos sin disimulo.

Si tomo sus manos... ¿podré volver? Evitar que South...

Apretó los puños.

No.

No funcionaba así. Incluso el propio Takemichi se lo estaba explicando.

El chico valiente que siempre dio la cara por todos, protegió a ToMan y trató de evitar más de una muerte le estaba pidiendo que se uniera a él para evitar más destrucción.

Para proteger a una última persona.

-¿Por qué? -le susurró ella-, ¿por qué sacrificar tu felicidad por alguien?

-Porque... cuando pienso en mi felicidad no puedo evitar pensar también en la sonrisa de Mikey-kun. Él nos necesita.

Tal vez fue su mirada, o la confesión que le había hecho.

O la increíble mentira que su cabeza trató de creerse cuando se despidió de Mikey meses atrás.

Había otra cosa que su cabeza trataba de creerse: qué todo estaba bien y seguía el mejor camino para ella. Lúan quería creer que sí, pero desgraciadamente su corazón no opinaba lo mismo.