Cayendo en tus Alas

Capitulo 8

Visita a mi Próximo Hogar

Las horas avanzaban, pase toda la mañana organizando, pedimos pizza y refrescos, para almuerzo, me encantaba, pero no muy saludable. Me di un buen baño, debía prepararme para cuando Lanoy me llame, estar preparada. Me decidí por un jean, una blusa simple azul pero sexy, unas zapatillas, y para el pelo, esta vez me hice un moño bajo con una cinta y lista.

Eran las tres de la tarde cuando escuche mi celular sonar.

- ¿Si? Hola –respondí.

- ¿Nathy? Soy yo Lanoy, ¿Estas lista?, estoy aquí al frente, te espero - me dijo.

No sé por qué en ese momento al escuchar su voz, me sentí tan contenta. Busqué una nota en la que tenía algunas notas de algunos alimentos para comprar.

- Sii, lo estoy, ya voy- le dije. Espera

Tomé mi bolso, me despedí de las chicas y salí en bola de humo de allí. Estas me gritaron a una voz, que recuerde las cosas que tenía que comprar, porque mañana domingo haríamos algo especial fuera de casa.

Allí estaba el esperándome, recostado en su auto, con un Jean ajustado, una camisa por casualidad también azul manga corta, con los primeros botones abiertos los cuales dejaban ver un cuerpo musculoso y varonil y acentuaban sus bíceps, me tenía cautivada su belleza, parecía un príncipe, bueno para mí lo era, pero solo éramos amigos.

Tenía deseos de correr y lanzarme en sus brazos, abrazarlo hasta que ya no pueda más, me embriaga su perfume, su amabilidad me consume. Al verme parada toda embobada mirándolo, esbozo una carcajada y me dice:

- ¿Qué pasa preciosa, no puedes resistirte a mi belleza?

Sentí que me puse roja como un tomate, pero no me dio tiempo a responder y me dice nuevamente:

- Es broma Nathy, porque te pones roja, ¿Qué te pasa? ¿te sientes mal?

Me acerqué a él y le dije:

- No es nada, mejor vámonos

- A sus órdenes mi lady- me dijo con ironía.

Arrancó el auto, me miraba de reojo y salía una sonrisa burlona de sus labios.

- De ¿qué te ríes? - le dije, con voz triste y haciendo pucheros.

- ¿Nunca has tenido novio? - me preguntó.

- No, nunca, no he tenido tiempo para eso, además, no creo en el amor- le respondí.

- Eso explica todo, porque te sonrojaste y te quedaste mirándome de esa manera- me dijo. ¿Has ido a alguna fiesta antes?

- No, ¿quieres llevarme a alguna? Quizás conozca a alguien que me guste, aunque sea un juego, y además no se bailar- le dije con la cabeza baja.

Se puso serio, de repente su rostro cambió y paró el coche.

- Te llevaré a una fiesta pronto, si quieres ir. Debes salir y conocer el mundo. Y yo te enseñare todo lo que necesitas saber. Te lo prometo.

Con una mano tomo mi barbilla con delicadeza y me levanto la cabeza y me dijo:

- Eres preciosa, nunca te avergüences de nada. Recuerda, estoy aquí para ti, siempre estaré a tu lado.

Se me acercó, tan cerca que sentí su perfume, me dio un beso en la mejilla, y luego me miró, y me dijo:

- Eres una personita encantadora, me encanta tu olor, hueles dulce. Ese olor me recuerda a alguien de mi niñez, que quería mucho, aunque no recuerdo nada de ese entonces, pero quiero que sepas que te aprecio mucho de verdad.

- Gracias amigo mío- le dije- yo también te aprecio mucho. Si la querías ¿porque no la buscaste?

- Si, la he estado buscando desde hace tiempo, ciertas circunstancias nos alejaron y me dediqué a los estudios, aunque no recuerdo mucho de ella, solo unos ojos azules y un lunar- me dijo.

- Ok. Te entiendo, yo también tuve un amigo en mi niñez, pero no recuerdo nada de él, era mi ángel. -Le contesté- Eso ya pasó, dejemos las cosas tristes, ya estamos en el presente y contigo no siento tristeza. Le pique un ojo y sonrió.

Continuamos y momento después, parqueó el coche en unos departamentos, eran cuatro, muy lujosos, de tres plantas, comprendiendo así, doce bloques. Bajamos del coche, me tomo de la mano y me encamino a la entrada junto a él.

- Tengo la llave -me dijo, recuerda que son alquilados por la empresa en la que vas a trabajar, y he conseguido a que lo puedas tener a bajo precio, ya que eres una empleada de ahí. Además, me dijo:

- El departamento está ubicado en el bloque tres, es espacioso y muy bonito, dos habitaciones un año y la habitación principal también tiene su baño propio. Te visitaré siempre, vivo en un departamento cerca de aquí, aunque casi no lo uso, solo a veces cuando se hace tarde y no me da tiempo irme a casa. En esta zona no hay peligro, estos departamentos tienen alarmas para cualquier emergencia.

-Vamos- me dijo.  Subimos a través del ascensor al departamento, tal y como me dijo Lanoy, era muy bonito y elegante.

- Waoooo, esto está muy bien, muchas gracias mi ángel, ¿no te molesta que te diga así? - le dije.

- No me estarás comparando con aquel chico del pasado, ¿verdad? - me dijo.

- ¿Estas celoso? - le dije con ironía.

- ¿Celoso yo? Ni lo digas – me dijo. De pronto me atrajo hacia él y me dio un abrazo indescriptible.

- Bueno, ya lo has visto, ahora vamos a cenar- me informó.

- Ok, lo que usted diga mi ángel, gracias por todo- le dije. Quiero que me hagas un favor.

- Ok, ¿de qué se trata? –me dijo Lanoy.

- Tengo que pasar por el super a comprar algunas frutas, mañana tenemos un Picnic, si deseas puedes ir-le dije.

- Ok, está bien, aunque no creo que pueda ir, tengo una reunión mañana- me dijo. Le dije que estaba bien y fuimos a comprar lo que necesitaba.

Cuando llegamos al carro, ya pasaban diez minutos de las siete de la noche, fuimos a cenar, luego entre bla bla bla y risas me llevó a casa.

- Que duermas bien preciosa, hasta mañana. -me dijo. Tirándome un beso al aire.

- Igual mi ángel, hasta mañana, gracias por hoy, bye, bye- le dije- moviendo las manos con ademán de adiós.

___________________________________________________________________________

Hola chic@s.  

Espero que estén bien.

Ahí les dejo el capitulo 8, no es tan largo, pero, espero que les guste.

dejen su voto y un me gusta por favor.

Gracias, besos robados.

Aini_m