𝓙𝓪𝓺𝓾𝓮 𝓜𝓪𝓽𝓮 ♤ 𝐻𝑎𝑟𝑢𝑐𝒉𝑖𝑦𝑜 𝐴𝑘𝑎𝑠𝒉𝑖 𝑥 𝑂𝑐 ♤

Capítulo 13

| Cambios |

Abrí mis ojos de forma lenta. Lo primero que sentí fue un poco de dolor de cabeza, y claro, el resfrío no se iría de un día para otro.

Dai estaba dándome la espalda mientras yo la abrazaba, acaricié un poco su cabello... al menos estábamos a salvo aquí, pero no podríamos volver a casa tan pronto, solo a buscar nuestras cosas y tendríamos que ver algún arriendo temporal y barato, además de que Sanzu destruyó el suelo de mi casa, y si mataron afuera a la vecina debió haber llegado la policía también.

Al estar más despierta, fruncí mi ceño al sentirme algo incómoda.

-Haruchiyo. -susurré volteando mi cabeza y moviendolo un poco con una de mis manos, despertó de golpe- apártate, me aprietas.

De inmediato quitó sus manos de mi cintura, colocándose boca arriba otra vez.

Volví a acomodarme dándole la espalda, cerrando mis ojos.

-no lo hice a propósito, para que sepas. -comenzó a decir.

-no te pongas nervioso, Romeo. No fue nada. -susurré.

-voy a fumar. -quitó las mantas de la cama.

-oye. -me di la vuelta, él estaba sentado en la orilla de la cama, dándome la espalda- esos hijos de puta de ayer hicieron que enferme, ¿hay algún remedio?

-no sé qué decirte, solo uso las pastillas para drogarme. -me volteó a ver. Solo puse los ojos en blanco.

-olvídalo, después le pregunto a tu hermana. -suspiré.

-no es mi hermana. -se levantó de la cama.

-hermana adoptiva o... lo que sea. -me volví a cubrir con las mantas con algo de frío- una última cosa. -abrí mis ojos mirandolo cuando estuvo a punto de irse- ¿siempre duermes abrazándo algo o te bajó el amor anoche? -sonreí burlona.

-cierra la boca, eres incómoda de todas formas.

-que lindo que notes mi textura.

Sanzu solo salió de la habitación dando un portazo.

Dai dió un brinco a causa de eso. Ese idiota...

-uhm. -levantó su cabeza, su cabello estaba desordenado, pero a penas me vió abrió sus ojos como platos, mas grandes de lo que ya eran al despertar- ¡Diane! -me abrazó.

-buenos días mi vida... ¿cómo estás? -le correspondí el abrazo.

-bien. -asintió apoyándose en mi pecho- ¿en donde estoy? -miró a su alrededor.

-en una habitación de este departamento... te traje aquí anoche, te dormiste en el sillón.

-¡ijj! -ahogó un grito- ¡verdad! Ayer quería verte, me dió miedo estar sin ti.

-¿te trataron bien estas personas? -Dai asintió.

-si, pero al principio no quería soltar a Sazu. -explicó jugando con mi playera- pero lo tuve que soltar porque estaba in... im... uh... -intentó pronunciar.

-¿incómodo? -ella asintió- no lloraste, ¿verdad?

-no porque si no lloraba entonces Sazu me iba a comprar un juguete. -sonrió.

-que linda, eres muy fuerte. -besé su cabecita- ¿nos levantamos?

-sip. -asintió, comenzando a levantarse.

Pasó por encima mío, apreté mis labios para no gritar cuando aplastó mi herida. Luego bajó de un salto de la cama.

-tus bebés están bajo la cama. -avisé estirando mi mano para alcanzar mi móvil.