𝓙𝓪𝓺𝓾𝓮 𝓜𝓪𝓽𝓮 ♤ 𝐻𝑎𝑟𝑢𝑐𝒉𝑖𝑦𝑜 𝐴𝑘𝑎𝑠𝒉𝑖 𝑥 𝑂𝑐 ♤

Capítulo 23

| Derrumbe |

Esto era raro.

Se me hace extraño ver a los hijos de Qiang justo aquí delante mío. Si bien él ya lo había mencionado, jamás pensé llegar a conocerlos.

Tao, el chico de 17 años que vino por mí se encontraba al lado de su hermano, Wang, un chico de 19 años más alto que Tao, su cabello era rubio y sus ojos cafés bastante claros, este usaba unos anteojos y lucía bastante serio.

Qiang en cambio, estaba justo delante nuestro, mirándonos de forma seria y de brazos cruzados.

-¿por qué querías verme? ¿Estamos en una reunión familiar o algo así? -sonreí mirando a ambos chicos.

Ellos ni siquiera debían saber de mi existencia, ni mucho menos de la de Dai.

-esperen afuera. Gracias por traerla, Tao. -ordenó Qiang a ambos chicos, quienes aceptaron sin más.

Cuando estuvimos solos, Qiang y yo nos volvimos a mirar, yo atenta a lo que quería decirme.

-¿qué le sucedió a tu nariz? -me miró con seriedad.

-mucha gente esta molesta conmigo últimamente... ¿qué hay de tus hijos? Supongo que no les has hablado de...

-no. -me interrumpió- ya te dije un millón de veces, que no tengo más hijos. Pero... es precisamente de este asunto del cual quiero hablar.

-¿sobre Dai? -alcé una ceja.

-Diane. -comenzó a decirme- mis hijos se verán involucrados en este enfrentamiento que se aproxima, ambos saben cómo usar armas y cómo defenderse, están entrenados a la perfección, sin embargo... estoy seguro que Miang vendrá por ellos a penas se entere de que están aquí con el único propósito de causarme daño.

-¿y qué quieres que haga por ellos?

-lo que intento decir, es que Miang vendrá por mis hijos... pero si de alguna manera llega a enterarse que Dai y yo compartimos sangre, irá por ella, que es mucho más fácil. -sentí mi corazón acelerarse con algo de preocupación- te lo advierto, esa niña no involucra parte de mí en absoluto, sólo tú puedes impedir que algo le suceda.

-ella está a salvo conmigo, y por las tardes lejos de todo este mundo.

-contigo no está a salvo, y si sigue manteniendo un lazo tan cercano jamás estará lejos del todo. -suspiró- lo dejo en tus manos.

Apreté mi mandíbula levantándome de mi lugar, no permitiría que nada le sucediera a Dai jamás.

Ahora tengo tantos asuntos en mente... Ran, Dai, los papeles de Bonten, el idiota de Haruchiyo... y pensar que anoche pensé que estaba en el cielo.

-Diane. -una voz familiar me hizo apartar todos esos pensamientos.

-Boby. -le sonreí- he estado muy solicitada el día de hoy, es cierto que todo hombre necesita de una mujer para-

-cállate. Ya sabes la razón de porqué estoy aquí. -quedó frente a mí- traicionaste a Ran.

-no traicioné a nadie, fui drogada y no medí mis palabras. En todo caso, Ran sabía desde un inicio a lo que se enfrentaba. -me puse un poco más seria.

Miró detrás suyo, luego me miró a mí acercándose un poco más intentando ser discreto en la conversación.

-tenemos que conseguir que Mikey le de otra oportunidad. -fruncí mi ceño- que al menos hable con él y lleguen a un acuerdo.

-el líder podría perderlo todo por su culpa, dudo que salga vivo de esta.

-no si lo recupera todo por su cuenta.