Para encontrar el corazón

Capitulo 45

N / A Bueno, aquí está el último capítulo hasta el primer martes después del Día de Acción de Gracias. ¡Es bastante largo y lo escribí muy especial!

Descargo de responsabilidad : no soy dueño de Bleach, ni de ninguno de sus personajes, y no gano dinero con esto.

El Infierno no tiene Furia

Cuando el capitán del escuadrón once bloqueó el ataque, su espada salió volando hacia los lados, dejándolo empujado contra una pared cercana con la espada de Unohana en su garganta.

"No he cambiado en absoluto..." comenzó Unohana, sorprendiendo a su futura sucesora con sus palabras.

"Es bastante simple realmente... la última vez que peleamos ni siquiera tuve la oportunidad de usar esos trucos". Unohana aclaró, lo que provocó que los ojos de Kenpachi se abrieran en estado de shock.

"¿Quieres decir... que me volví... más débil?" Kenpachi preguntó con una voz de pura confusión. Hubo una breve y silenciosa pausa en el discurso entre los dos, ya que la pregunta del capitán quedó sin respuesta.

"Solía... admirarte..." comenzó Kenpachi.

"Árboles, insectos, gente, no importa lo que golpee, se siente igual. Aburrido... era lo mismo que blandir mi espada en la oscuridad". Kenpachi continuó.

"Cuando luché contigo... sentí miedo por primera vez. Por primera vez, disfruté de una pelea. Ese fue el momento en que tomé mi decisión... decidí que quería pelear contigo... y ahora..." Kenpachi se calló.

"¡¿Voy a morir aquí... SIN PODER DERROTARTE?!" Kenpachi rugió, inmediatamente antes de que una espada se clavara en su garganta.

"Maldita sea..." Kenpachi susurró débilmente antes de toser una pequeña cantidad de sangre.

Muy rápidamente, Unohana retiró la hoja de su cuello, permitiendo que su cuerpo casi sin vida cayera al suelo de la prisión.

" La primera ronda ha terminado... " pensó Unohana antes de soltar un suspiro. El capitán del escuadrón once había perdido el conocimiento en ese momento, y eso le dio un respiro antes de curar sus heridas.

Sus pensamientos comenzaron a viajar hacia lo que vendría, específicamente, cuánto tiempo pensaba que le quedaba. Habían estado luchando durante casi una hora hasta ahora, y aunque estaba lejos de terminar, el final definitivo se acercaba.

A estas alturas, Isane probablemente había encontrado su carta. Unohana simplemente esperaba que su subordinado no se tomara las cosas demasiado duras o demasiado personalmente. La niña era una sanadora talentosa, pero estaba increíblemente emocional. Ella se rió un poco ante eso, considerando que Isane aparentemente era exactamente lo opuesto a su "viejo" yo en muchos sentidos.

La teniente de cabello púrpura probablemente era una sanadora porque se preocupaba mucho por salvar vidas. Unohana, por otro lado, desarrolló sus habilidades de curación con el único propósito de luchar durante el tiempo que quisiera.

" Es bastante irónico que una chica como ella me admire ... " pensó Unohana antes de volver la cabeza hacia la inconsciente Zaraki.

Ella extendió su mano y lo envolvió en una caja verde de kido, un momento después del cual la barrera se rompió, revelando que el capitán estaba ileso. Sin embargo, todavía estaba inconsciente.

La Sociedad de Almas: 8 º cuartel de División, Oficina de Ukitake

"Es un gran día que estamos teniendo, ¿No dirías Jushiuro?" Preguntó Kyoraku en broma mientras servía un platillo de sake tanto para él como para su amigo de pelo blanco.