capítulo 8 Ojos verdes.

371 34 6
                                    

Pov Anastasia

Estoy nerviosa, llevo un año sin bailar y tomar el entrenamiento y calentamiento requerido. Araceli me ha ayudado en estos días pero siento que ya no soy la de antes, también tuve algunas crisis de dolor pero no dije nada, lo último que quiero es preocuparlos o peor aún, que Dante esté en contra de que vuelva a bailar. Si llegara a suceder el hecho de que Dante se negara obvio no haré lo que él diga, pero eso supondría problemas en nuestra relación y es algo que no quiero.

— La chica canguro llegará en un par de horas Ana.

— No le llames así. — le digo a Araceli mientras escribe sin parar sabrá Dios qué en el móvil.

— Es un término Anastasia, es la encargada de cuidar un bebé, se les llama así. — responde con obviedad y poniendo los ojos en blanco.

— No me gusta como suena. ¿Qué tanto escribes ahí? — la curiosidad me gana.

— N-nada. — alerta roja, Araceli nerviosa.

— Araceli Miranda, dime. — entrecierro los ojos para intimidarla, a Estefany siempre le funcionaba así que espero que a mi también.

— No seas chismosa. — se aleja.

— No es ser chismosa, soy tu amiga y tengo derechos.

— ¿Quién lo dice?

— Artículo 45 de la constitución de la república, inciso d: las mejores amigas tienen derecho de saber cada paso de su amiga, con quien se mensajea en WhatsApp y cuantos chicos ha besado. — imito voz de intelectual.

Primero me mira serio tipo, WTFFFFF, pero luego comienza a reír y no puedo evitar unirme a ella.

— Ya en serio, dime. Estás rara, es que el simple hecho de haber decidido venir acá con nosotros y dejar Nueva York atrás me dice que algo sucede. — se queda en silencio y mirando a la nada. — sabes que puedes contarme lo que sea. — me arrodillo ante ella y agarro sus manos, están frías.

— Ay Ana. — sus manos tiemblan cuando las lleva a su rostro. — Tuve una fuerte pelea, con mi madre. — lo sabia.

La relación de Araceli y su madre no es la mejor del mundo. Todo comenzó cuando teníamos 12 años y Araceli no quería llegar a su casa luego de las clases de ballet, las chicas y yo nos dimos cuenta que algo pasada, ella no quería contar. La mamá de Estefany es psicóloga, ella la ayudó, y ese día, contó que su padrastro la vigilaba siempre que ella iba a tomar un baño, o cuando dormía, varias veces en las noches despertaba y él estaba en su habitación mirándola fijamente. Su madre no creyó nada, y desde aquel entonces la relación de ambas se volvió distante. Ella fue a vivir con su abuela cuando cumplió los 15 años pero esta falleció y tuvo que volver junto a su madre, con su padre nunca pudo contar, el vive en Rumanía con su nueva esposa e hija menor que Ara, además, ella nunca le contó a su papá sobre ello, las pocas veces que hablan las cosas son tan incómodas que a penas y va más allá de unos saludos y lo esencial de la vida de cada uno.
Miro los ojos de mi amiga y se me agrieta el pecho, juro que en mi vida he visto a Araceli llorar, a no ser cuando supieron todo lo que me ocurría con Brandon o, el día qué, ese hombre casi... Dios, no quiero ni recordarlo.

Estábamos en segundo de secundaria, esperábamos a Araceli en la casa de Estefany donde siempre nos reuníamos para nuestras prácticas. Emy siempre fue más apegada a Araceli, estaba muy preocupada, la llamaba y no contestaba y algo sabía que las demás no. Después de presionarla lo más que pudimos, y con la ayuda de Doroty la mamá de Estefa, Emy nos confesó que Peter, el padrastro de Araceli estaba solo en la casa con ella y no la dejaba salir. Ara le había escrito contándole que por esa causa podría demorar un poco hasta que pudiera escapar. Enseguida los padres de Estefany tomaron cartas en el asunto. Intentaron llamar a la mamá de Araceli pero esta estaba fuera de la ciudad, además de asegurar que Peter jamás le haría daño a su hija y confiaba 100% en él. Fuimos hacia el departamento de Ara, nadie respondía al llamado de la puerta, las chicas y yo estábamos muertas de miedo y más aún al ver a Emy tan afectada. Llamaron a la policía y el padrastro tuvo que abrir la puerta. Araceli estaba encerrada en su habitación en una esquina llorando y temblando, se rehusaba a abrir la puerta por miedo a que él estuviera cerca, hasta que supo que éramos nostras.
Luego de ese día, la relación con su madre fue de mal en peor, Julliette, su mamá, aseguraba que Araceli solo era una chiquilla malcriada queriendo llamar la atención, prefirió creer en la palabra de ese hombre ante la de su hija. Araceli se vio obligada a vivir con ellos hasta que cumplió la mayoría de edad y se fue a donde Emy, pero, su madre y Peter se divorciaron hace unos meses y ella volvió con su mamá, pero, ahora no entiendo nada.

En la paz de tus brazos Where stories live. Discover now