En la paz de tus brazos

capítulo 14 te quiero a ti

Pov Anastasia.

Tres meses, ya han pasado tres meses en los que siento que mi vida ha dado un giro tremendo. Si con 16 años hubiera pensado que no sería una bailarina de ballet y me viera ahora bailar de este modo tan sensual y sexi mientras dos chicos están a mi alrededor siguiéndome el paso, no lo habría creído. El hip hop es muy top y eso me gusta, me encanta explorar en estos nuevos ritmos, ser atrevida y todo lo que estoy aprendiendo en esta academia. El twerk no solo es un baile para sacudir el culo como dice Mateo enojado siempre que nos ve a Ara y a mi ensayar en casa, tiene tantos beneficios que creo que me estoy haciendo adicta a este baile y no solo por la mirada encendida de Dante siempre que me ve.

La canción The Vegas de Doja Cat suena en todo el salón y mi equipo de baile conformado por mi, Araceli, Rachel, Mauro, Donato y Riven. Araceli y Riven crearon la coreografía y luego de 1 semana de ensayo aquí estamos siendo evaluados por el ojo crítico de Cassidy y los demás chicos de la academia. Estoy muy cerca de Riven mientras bailamos, él me mira y yo trato de parecer confiada pero, tengo que confesar que estoy luchando para no desestabilizar mi concentración en el baile por el modo en que sus ojos verdes me consumen.

La música finaliza y con ello nuestra presentación, todos aplauden eufóricos y hay silbidos. Mi amiga y yo nos abrazamos aún agitadas y con la respiración entrecortada y reímos.

— Muy bien chicos, el nivel de sus movimientos es superior. — habla Cassy — Enhorabuena. — aplaude y todos la imitan una vez más.

— Gracias — dicen Ara y Rachel a la vez.

Rachel es una chica súper buena honda que desde hace un par de meses se ha apegado mucho a nosotras. Es súper divertida y una excelente bailarina. Mauro y Sandro son los amigos de Riven, y pues, Sandro anda tras los huesos de mi amiga así que cuando se hizo el sorteo para elegir los líderes de los grupos y Riven fue uno de los ganadores pues, tenían el derecho de conformar sus grupos y a parte de sus amigos nos eligió a nosotras.

— Tienen una calificación de 10. — damos saltos cuando nos dan la nota máxima. — Pueden sentarse. ¡Próximo equipo! — anuncia.

Vamos hacia una esquina del enorme salón cuando agarramos nuestras cosas y nos sentamos en el suelo. Reviso mi móvil mientras bebo un poco de mi botella de agua y Meibis me envió una foto de Danna comiendo de su papilla, automáticamente sonrío.

— Es hermosa tu hija. — dice Riven mientras se sienta a mi lado.

— Es un cielo. — digo mirando a la pantalla con mucho orgullo.

— Se parece a ti. — lo miro y sonrío.

— ¡Qué va! Es idéntica a Dante. — su mirada no deja la mía cuando hablo, ahora mira al frente.

— ¿Están casados? — pregunta sin verme.

— No. — miro al suelo pensativa.

— Creo que cualquier hombre con sentido común debería asegurar a una chica como tú. — lo veo de golpe.

— ¿Una chica como yo?

— Si. — me observa y no aparta la mirada, al contrario, la intensifica más.

— No soy nada especial. — si supiera todo lo que he vivido y lo jodida que he llegado a estar.

— No te des tan poco valor Anastasia. Estos meses en los que te he conocido y pues, y lo que hemos compartido, no ha sido difícil ver lo hermosa, delicada e inteligente chica que eres.

— ¡Dios! Gracias. — digo riendo y sonrojandome.

Comienza la música de la próxima coreografía, miro al frente pero mis oídos siguen atentos a sus palabras.