En la paz de tus brazos

capítulo 33: Pavor

Pov Anastasia.

Él dijo que me amaba y juró que sentí como el alma me volvía al cuerpo. Solo quería correr a su brazos y hundirme en ellos mientras sus grandes manos acarician mis cabellos como si de ceda se tratara. La situación es difícil, lo sé, que no estoy actuando de la mejor manera ni la más inteligente también lo sé. Lo último que quiero es decepcionar a Dante o peor aún, que algo malo le suceda a algunos de mis amigos por mi culpa, o a mi hija, solo de pensarlo un horrible escalofrío me recorre el cuerpo.

- Prometeme algo.

- ¿Qué?

- Que no me volverás a alejar de ti. - hasta fui capaz de suplicarle con mis ojos y aún así...

- Perdón por no poder cumplir esa promesa.

El recuerdo me invade. Yo lo golpeaba e insultaba porque sentía como mi corazón quería salir de mi pecho y tomar partida en esta situación, quizás, si él lo viera, cambiaría de opinión y elegiría amar a mi corazón en lugar de destrozarlo.

- To odio. - le decía cuando en realidad deseaba gritar a los 4 vientos aje lo amaba.

- Odiame, ya estaba listo para esto.

Pero él me besó, calló mi alma y mi conciencia con ese beso que me decía que todo estaba bien, Dante seguía ahí, el chico del que me enamoré sigue estando en el mismo lugar, detrás de una máscara pero, sigue ahí.

Los chicos se fueron y parecía algo urgente. A veces solo me siento a pensar y termino llorando o asustada, como ahora. Miro a mi alrededor, otro sitio extraño que no se siente como un hogar. Cerca de una decena de hombres nos vigilan, no puedo usar internet siempre que quiera, la última vez que hable con las chicas Óscar decidió cambiar la contraseña del WiFi y ahora no tenemos acceso a ella. Me siento una prisionera, es como, si mi juventud se estuviera escapando de mis manos ante mis propios ojos y eso me asusta porque, al final de todo, en un par de días cumplo 21 años y aquí estoy, sin haber logrado nada en mi vida, siendo el peor ejemplo para la pequeña niña que ahora depende de mi. ¿Qué le voy a enseñar a Danna? Como fui capaz de aguantar por tanto tiempo maltratos de un chico? O como no sé que hacer con mi vida en estos momentos? Siento que soy la peor madre del mundo.

Araceli e Irirna entran a la habitación, seco mis lágrimas corriendo pero ellas se dan cuenta. Mi prima con su enorme y hermosa panza llega a mi lado y se sienta dándome un reconfortante abrazo. Ara va directo a la cuna de Danna y habla con ella mientras ambas ríen.

- No me gusta verte así Ana. Siento que una vez más vives en un mundo de sombras, y odio eso. - sus palabras tienen mucho sentido.

Hace casi un par de años eso era mi vida, caminar cabizbaja, con ojeras y miedos todo el tiempo. Hoy estoy igual, solo que el miedo es diferente, es aún mayor porque, no es lo mismo huir de un adolescente con problemas de personalidad que de unos mafiosos sin escrúpulos.

- Yo estoy bien, es solo que, extraño a mis padres. - no miento del todo, si los extraño.

- No soy tonta Ana, te conozco a la perfección. - la beso en la mejilla.

- No te preocupes. ¿Sabes ya que nombre ponerle a esa hermosa princesita que viene en camino? - sonrío y cambio de tema, ahora ella se emociona como niña chiquita.

- Ay no sé. ¡AAAAHH! Tengo miedo hasta de elegir mal el nombre. - reímos. - Flavio quiere que sea Stormy o Cassidy, le dije que si es por alguna ex le voy a cortar las pelotas. - lo último lo dice con voz amenazante.