Abril 2023
El GP de Argentina pillaba justo en varios días libres que me habían dado en el trabajo por semana santa, y eso, sumado a un par de días que pedí para poder volver a tiempo a casa, me permitió viajar sin problemas y acompañar a mi chico en el gran premio de la República Argentina.
Anne me acompañaría durante el fin de semana, aunque no era gran partidaria de mi reciente y confusa relación con Marc. Y es que si, tal como lo leyeron, pasé de ser una fan algo loca, a ser su alocada... ¿Casi novia?
Debo admitir que aún no daba crédito a que nuestra "relación" fuese algo medianamente real y no tan solo producto de mis fantasías, pero el destino puso tanto de su parte para que no me olvidase de él, que solo me había quedado aceptarlo y quererle, cosa que realmente no es que me fuese tan difícil. Aunque siendo honesta, en ocasiones me provocaba darle con un palo, sobre todo cuando discutíamos, pero incluso a pesar de eso, podía sentir que él me quería tal como yo lo hacía, tan solo nos faltaba hacerlo oficial.
Bendito aquel 16 de Febrero de 2022 cuando nos conocimos...
En fin, este fin de semana quería disfrutarlo de principio a fin, y por eso, considerando que quería dejar que mi chico, porque así lo sentía para mí, se concentrara, había convencido a Anne de acompañarme durante todo el GP.
- Joder Anne, ¿Dónde diablos estás? - la risa al otro lado de la línea me hace rodar los ojos con impaciencia.
- Tu tranqui Rosie, estoy de camino, es que... tuve un pequeño... Contratiempo.
- ¿Contratiempo? Contratiempo mis ovarios, ¿En qué andas metida?
Me siento en un banquito y apoyo mis piernas sobre mi pequeña maleta de viaje, esperando que la castaña se digne a aparecer. Vuelvo a escuchar como sonríe y siento que a pesar de que quiero estrangularla, no puedo enojarme con ella.
- Me he cruzado un... obstáculo... de camino acá, ya sabes...
- Jesús Anne, no sé si quiero preguntar - escucho una risita y como toma aire para responder, por lo que chasqueo la lengua haciéndola callar - nop, prefiero esperar a que llegues aquí y me cuentes qué clase de obstáculo ha sido esta vez, alma sucia.
- Nos vemoooos - su voz sigue divertida y no puedo evitar contagiarme - chaaaau.
Cuelgo la llamada de WhatsApp y bendigo los chip de internet internacionales, de lo contrario no tendría cómo comunicarme.
Me muevo en mi banquito hacia la sombra que entrega el edificio a mis espaldas, esperando que mi amiga aparezca pronto, aunque no puedo asegurar que vaya a ser así. Ya quiero llegar al hotel y luego al circuito.
"Petita, ya estás aquí?"
Miro el mensaje del idiota que me encanta y sonrío idiotamente, si, me lo ha contagiado.
"Anne se ha retrasado, pero no te preocupes, estaré bien mientras espero"
"🥺🥺"
"Está bien, nos vemos por la tarde, si?"
"Cuenta con ello guapo"
"Estoy deseando verte"
"También yo💙"
Levanto la vista y veo aparecer el auto de mi amiga. A medida que se acerca a mi, logro percibir claramente la fuerte melodía de las canciones de Pablo Alborán, lo que me hace reír. Anne estaciona su auto frente a mi y baja rápidamente a sacudirme en un abrazo efusivo, o en un intento de abrazo más bien.
