Pelear, besar y... ¿Como es que iba?

Verdad, mentira, es casi igual

Albus sacó los auriculares de sus oídos al ver la camioneta de su papá estacionar frente a él.

-No se lo dijiste ¿Verdad? -Preguntó a su madre.

-Prometí que no lo haría -Respondió. Ginny ajustó su corbata y besó su mejilla-Diviértete en tu fin de semana.

Fin de semana. Optimista forma de llamar a un viernes en la mañana. Yupi. Subió al vehículo, en la parte de atrás con Lily, cabe destacar que James se apoderó rápidamente del asiento de adelante.

-Resumen de la semana ya, ya, ya -Harry se puso en marcha, dirección "Hogwarts Instituto para Jóvenes Delincuentes" bueno no, no era ese el nombre oficial.

-¡Señor, si señor! -Le siguió el juego su hermana, Albus rodó los ojos- Esta semana hice una nueva amiga, es mayor, pero le caigo bien y me invitó a una fiesta en su casa ¿Puedo ir?.

-¿Qué dice tu madre?.

-Que te pregunté a ti.

-¿A mi? No, no, no, que ella decida -Una sonrisa nació en los labios de Harry.

-¡Papi! -Chilló Lily junto a él.

  Lily acababa de cumplir catorce hace algunos meses, y estaba obsesionada con ser "Relevante" y "Popular" en la escuela. Albus estaba harto y le sugirió a su madre que la diera en adopción hasta que se le pasara su etapa de niña irritante (A Ginny no le pareció gracioso).

-¿James?.

-La semana fue genial, los chicos se adaptan bien al cambio de capitán y si todo sigue así, ganaremos el juego de la siguiente semana -James siempre sacaba lo bueno a relucir primero, especialmente si iba a confesarle algo desagradable a Harry. Al se preparó para el golpe- En otras noticias, estoy apunto de reprobar álgebra e historia.

-¡James!.

-Tranquilo, tranquilo. Me estoy ocupando -Apaciguó haciendo un gesto con la mano para restarle importancia- Solicitaré un tutor, sé que no podré jugar si repruebo. Mejorare.

-¿Seguro? -Así era Harry, su enojo era efímero y solía confiar mucho en las personas a las que quería.

-Sip, mis próximas calificaciones opacaran incluso a las de Al, ya verás -¡Ja! Ni aunque tuviera al mejor tutor del mundo conseguiría tal cosa, pensó Albus ahogando una risa- ¿Algo te da gracia, enano?.

-Sí, pero no lo entenderías ni explicándotelo con dibujos.

-Basta, no quiero peleas. Son hermanos y deben respetarse.

James se sentó correctamente en su asiento, hablando una vez más.

-También fui invitado a la fiesta, mamá dijo que estaba de acuerdo si tú lo estabas. Será en Chelsea ¿Podemos ir?.

  Albus notó como su padre apretaba más el volante ante eso, se preguntó qué estaría pensando el viejo. Quizo expresar su duda en voz alta, pero se le adelantó.

-¿Qué hay de ti Al? ¿Cómo estuvo la semana? -Vaya giro totalmente sutil en la conversación. Fascinante.

-Lo de siempre. Nota máxima en todas las asignaturas, McGonagall buscando cada excusa para darme un castigo y mi intento constante de ignorar la incompetencia que me rodea.

-Poético. ¿No has pensado en ser escritor? -Le molestó James sarcásticamente, Harry miraba al frente nada complacido y Lily los ignoraba a favor de textear con sus insoportables amigas.

-Fíjate que si, pero no sabría que hacer con tanto éxito, no me gustaría seguir opacando tus mini logros, hermanito.

-Albus. Dije que basta.

Eso lo hizo cruzarse de brazos, bufando con fastidio. Estaba por devolver los audífonos a sus oídos pero Harry dijo algo más.

-¿Tú no vas a ir a la fiesta?.

-No -Negó tajantemente, sin querer entrar en el engorroso tema de su enemistad con la anfitriona de dicha juerga.

-¿Por qué no?.

-Albi no fue invitado -Maldito James. Ojalá se mordiera la lengua cada vez que usara ese estúpido apodo.

-¿No?.

-¿Podemos hablar de otra cosa? -Solicitó de mal humor. Su padre se lo concedió, más el cambio no fue para mejor.

-¿Qué vas a hacer con Maggie?.

-¿Qué voy a hacer con Maggie? -Contestó confundido.

-Tienes que congraciarte con ella, antes se llevaban bien...

Antes. Claro. Cualquiera con buen comportamiento y notas altas contaba con la benevolencia de la estricta profesora. Y cómo Albus solía contar con ambas características en el pasado... Llegó a ser de los favoritos de McGonagall.

-¿Y qué sugieres que haga? -Estaría difícil. Con todos los castigos que tenía acumulados y los pleitos que inició en clase.

-Estoy seguro de que pensaras en algo -Su padre le guiñó un ojo a través del retrovisor.

Albus resopló. Limar asperezas con Harry luego de su desmadre en la escuela resultó, por decir poco, complejo. No estaba seguro de que estuvieran "Bien" completamente, pero el viejo actuaba como que si, y no sería él quien sugiriera algo diferente.

-Vale, así lo haré -Lo intentaría. Así como le dijo a su mamá que intentaría mantenerse fuera de los problemas.

Ahora, si el destino se ponía caprichoso y lo empujaba a situaciones que lo ameritaban, nadie podría culparlo ¿Cierto?.