La Dueña | Megumi Fushiguro

"Fushiguro como Fernández" | MLD

[ Making "La dueña" con Megumi ]

Hola, soy Megumi Fushiguro y en este especial te voy a contar un poco sobre mi experiencia en "La dueña". ¡Acompáñenme!

Recuerdo que en Noviembre o tal vez a principios de Diciembre, MaJo me llamó y me dijo: "Oye, quiero iniciar un nuevo proyecto y te tengo en mente para el papel principal".

Esa llamada duro casi dos horas, mientras me contaba un poco sobre la historia y el personaje.

Admito que en un primer momento me asusté y pensé en rechazar, porque no es el tipo de historias que me gusta actuar, pero ella me seguía insistiendo, casi me sentía amenazado.

A menudo recibía mensajes tipo: "Tú eres Megumi Fernández" o me llamaba solo para decirme: "Hola Megumi Fernández" y ¡pum! Colgaba.

Una semana antes volví a recibir una llamada de MaJo y su editora, y dijeron: "Megumi Fushiguro, queremos que vengas al estudio el primero de Enero, serán las audiciones. Y si no vienes te vas a perder la oportunidad de tu vida".

¿Qué si me presenté? Bueno, eso es obvio. En el último momento nuestra escritora logró mover la piedrita en mi cabeza y terminé audicionando para Megumi Fernández, sí, en un día festivo.

«Yo realmente no sabía con exactitud si Megumi Fushiguro era el actor ideal, pero cuando escribía al caballerango solo podía pensar en él interpretándolo. Nació para ser Megumi Fernández, por eso le insistí tanto y creo que llegó a odiarme.» afirmó la escritora.

Las audiciones

Cuando llegué había bastante gente, no lo imaginé por ser primero de Enero, y comencé a ponerme nervioso. Por supuesto que MaJo me quería para el papel pero eso no significaba que lo tenía asegurado, o bueno, tal vez sí un poco.

Al pasar, tuve suerte pues me aclararon que Megumi Fernández era joven, muy apuesto, coqueto por naturaleza y enamoradizo.

Debo admitir que la escena que interpreté me gustó mucho, se podía sentir los sentimientos desbordantes del personaje, pero también me di cuenta que iba ser difícil interpretar.

Y no me pregunten sobre qué trataba la escena porque no tengo permisos para hablar sobre ello.

Capítulo piloto.

—Hola, estamos a veintiséis de Febrero y hoy es el primer día de grabación. Estoy nervioso. —dije a la cámara.

El resto del casting se preparaba en sus camerinos al igual que yo, la maquillista daba los últimos retoques y me encontraba listo para las cámaras.

—Admito que me siento raro de botas y sombrero. —me eché un último vistazo. —Pero nada mal.

Se respiraban aires de emoción y mucho estrés. Completamente normal en un capítulo piloto. Todo debe salir perfecto pues es desde aquí que se define la calidad de la historia y tal.

—Me sorprendí un poco cuando nos dijeron que íbamos a grabar en una hacienda real. —dije caminando a lo largo del set. —Pero bueno, nuestra escritora ha sido exigente en esos aspectos de su novela.

La gente caminaba de un lado a otro, murmullos e indicaciones a alta voz por todos lados, escenografía, cámaras, más gente, y un increíble sol sobre nuestras cabezas.