Capítulo I

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Agosto 2013

El despertador sonó a las 08:30 am. Hoy era mi primer día en tercer año de preparatoria; era gracioso saber cómo pasa el tiempo. Luego de un baño de veinte minutos me vestí para ir al instituto de Portland, sí, aquí es donde vivo. Seré muy breve con mi historia.

Mi padre murió cuando yo tenía cuatro años en un accidente aéreo, viajaba mucho así que en parte no lo conocí bien; mi madre sufrió un año y medio, después de eso se dio cuenta que debía seguir su vida y así lo hizo. Y un día conoció a George, un tipo con buenos contactos, dueño de dos compañías en esta ciudad, no me quejaba de lo que tenía, pero no era alguien que prefería más el dinero que mi propia vida. George es apuesto aun con sus treinta y ocho años, quiere mucho a mi madre, al menos eso es lo que dice siempre. Mi relación con él es demasiado distante; me recarga las tarjetas de crédito y eso es todo. Para mí es un extraño que saboteo nuestras vidas. Después que papá muriera mi comportamiento era cortante, estuve en terapia unos meses para superar la pérdida de mi papá, pero no le daba importancia. Los primeros años en la prepa fueron difíciles y más cuando me veían solo como la hijastra del más grande inversionista de Portland. Fue detestable en absoluto. Por suerte conocí a mi mejor amiga Raini. Su madre y la mía son tan buenas amigas supongo que por eso estábamos destinadas a ser mejores amigas. Con el tiempo todos comenzaron a llevarse conmigo pero sabía que ninguno era sincero, yo hacía las fiestas para cualquier ocasión. Sí, tenía popularidad pero no importaba mucho.

Me vestí con unos jeans ajustados algo gastados, una blusa con cuello V con un estampado de letras en inglés, acomodé mi cabello en una coleta dejando algunos mechones sueltos y un poco de maquillaje en la cara. Me pasé la mochila por el hombro.

Salí de mi casa a las nueve y caminé unos quince minutos para llegar a la escuela, me gustaba caminar. Tenía auto, un chevy plateado hermoso pero prefería caminar cuando se trataba de la escuela. Faltaba una cuadra para al fin llegar cuando un ruidoso motor me sorprendió, pasó cerca de la acera, se detuvo cuando el semáforo se puso en rojo. Le miré. Se notaba que hacía ejercicio pues su espalda estaba bien esculpida, llevaba ropa oscura e inclusive la motocicleta que conducía era de ese color. Me miró detrás de esas gafas oscuras, preferí ignorar la sensación que me provocó su mirada y caminé hacia el instituto.

— ¡Madre mía!—me asustó Rai caminando rápidamente hacia mí— ¡Me fascina tu blusa!—alardeó con su sonrisa de siempre. Una vez me contó que quería ser diseñadora de moda, así que respecto a mi atuendo...si traía algo que para ella resultase fatal para la ocasión ponía su magia de moda sobre mí.

—Que gusto verte de nuevo, Rai—me encogí de hombros y ella se echó a reír.

—Lo mismo digo—sonrió—, pero ese peinado no va con la ropa—ahí vamos de nuevo.

La experta Raini haciendo su magia, me desamarró la coleta y haciendo unos cuando movimientos en mi cuero cabelludo había quedado espectacular.

—Ahora sí, serás la chica más sexy que todos los chicos babearan—yo reí.

Guardé mis cosas en el casillero cuando sentí el brazo de Brad pasar sobre mi hombro.

— ¿Qué hay, preciosa?—guiñó un ojo. Le mostré mi mejor cara de repugnancia. Y le quité su mano de encima.

— ¿Ahora qué quieres?—dije en tono de irritación.

Mi historia con Brad es...bueno, resulto peor de lo que imaginé. Salimos unos meses hasta que me enteré que se tiraba a todas las chicas que quisiera. Dos semanas después me buscó y me rogó que volviera con él, que se había comportado como un idiota y me pidió perdón. Yo dije que no. Aceptó intentar volver a cortejarme y así ha sido hasta ahora.

FULL MOON {Raura/Rydellington}Where stories live. Discover now