FULL MOON {Raura/Rydellington}

Capítulo XXXVIII| Parte Dos

En toda mi vida me imaginé que habría un día en el cual me quedaría sin una palabra y simplemente estaría en shock.

Bueno, ahora lo estaba. Y realmente no era una sensación agradable.

Una parte de mí se estremeció y mi mente me obligaba a permanecer centrado en esa última frase que Emma había dicho.

«Tú madre se encuentra en peligro»

Yo sabía a lo que se refería. Ella hablaba de mi madre biológica. Aquella persona que me había abandonado a mi suerte.

—No les creo—encaré a ambos—. Díganme la verdad.

—No mentimos—dijo Emma—. Díselo, Evan.

Su hermano me estudió por unos segundos antes de hablar.

—No importa lo que te contemos, no confías en nosotros. No confías en tu familia—recalcó—. Deja de esforzarte Emma, es completamente estúpido.

— ¡E-Evan...!—gritó Emma.

Evan corrió del lugar y lo vi sumergirse en el sombrío bosque. Emma bufó ante el comportamiento infantil que tomó su hermano.

—Nos encontraremos en otro momento.

Fue lo último que me dijo antes de irse detrás de su hermano. Iba a decirle que no había necesidad, pues por mi parte no me interesaba lo que ellos tenían que decir, pero ella ya había desaparecido al igual que su rastro.

Cerré los ojos y unas inmensas ganas de aullar me atraparon.

Cálmate, Ross.

Mi madre estaba en peligro. Mi madre...seguía viva. Un nudo se atoró en la garganta, para mí era difícil procesar esas palabras. Incluso no debería llamarle «mamá», puesto que nunca había estado a mi lado. Diecinueve años de ausencia. Era demasiado tarde. Lamentablemente una parte de mí le dolía.

Cuando era pequeño, durante los recesos en la escuela me sentaba solo en los columpios mirando al cielo o al vacío, imaginando qué sería de mi madre, y preguntándome porqué me había abandonado.

De algo estaba seguro en estos momentos, mi mente no estaba al cien para ir al hospital y cerciorarme que todo estuviese bien.

Necesitaba estar a solas.

«Siempre estaré para ti, Ross»

Solo dos personas me habían dicho eso. Desafortunadamente ya no contaba con ninguna porque una de ellas me odiaba y se había alejado de mí por mis mentiras, y bueno la otra persona no sabía nada acerca de mí ya que le había quitado sus recuerdos.

Metí mis manos dentro de mis bolsillos y comencé a caminar sin ningún rumbo en particular.

****

El día menos esperado llegó. Era sábado y tenía que ir a cumplir mi castigo por golpear a un imbécil que trataba de seducir a mí... ¿A mí chica? Laura ya no era nada mío y si en algún momento desafortunado recuperaba la memoria me odiaría. Justo como mi hermana lo hacía.

Aunque podría simplemente no ir puesto que el director Worthy ni siquiera iba a ir para verificar que los tres alumnos castigados fueran. Pero la sola idea de dejar a Laura con Brad...No. Yo tenía estar ahí.