Slave (JJP)

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Cancelar el paseo por el sendero de los árboles de manzana fue una tragedia para todos los donceles, algo de lo que se habló con rabia y molestia, no obstante y como siempre, propio de ellos, la elegancia prevaleció; ellos eran donceles con experiencia. Pero JinYoung no, Park esperaba ir para cuidar de los niños de las sucias manos del príncipe Cha EunWoo. No podía decirle a nadie que sospechaba que ese engreído príncipe era un traidor que pondría en riesgo a la nación y las vidas de la realeza, lo que lo ponía contra la espada y la pared, pues al verse en la obligación de guardar silencio, le estaba permitiendo que tomara ventaja sobre la situación.

Lo peor es que ese idiota algo le había dicho algo a la realeza para que el príncipe Lim le llamase la atención.

— Tienes con conflicto con mi futuro cuñado, y aunque él sea de mi desagrado, no puedo permitir que un doncel de la corte tenga una enemistad con un miembro de la familia real. — habló el príncipe, mirándolo a la cara mientras bebían té. — si esto continúa para el día de la boda, me veré en el deber de traerte a este palacio por el bien de todos.

— No voy a negar lo mal que me cae. — fue lo único que pudo decir, tomando la taza con ambas manos para calentarlas. Lim lo miró alzando una ceja, ya que así no se tomaba el té, esos no eran los modales correspondientes para hacerlo, o al menos no frente a la realeza. — Hasta me enojó saber que esto fue su idea. No tiene idea de cómo me aburro.

— ser un Doncel es el mayor honor que se le puede regalar a alguien como nosotros. — comentó Lim, dejando su taza sobre la plato. — es símbolo de virtud, sabiduría y elegancia.

— el símbolo de virtud me aburre. Estaba bien cuidando a los niños, la gente no notaba que me limpiaba en la ropa o que les enseñaba a hacer travesuras, ya que es parte de su infancia. — manifestó con cierta rebeldía salvaje a los ojos del príncipe. — en fin, eso me dio igual, pero voy a acusar al príncipe de todos sus pecados si usted promete guardar silencio.

— tu palabra no tendrá valor para mí por la poca importancia que le tienes a tu título. — le advirtió de forma clara.

— no mire usted mi título, porque yo no miraré el suyo, quiero hablar con la familia de los niños. — dijo ansioso. — pero, en serio, en serio, en serio, necesita saber por qué nos llevamos mal.

— sea lo que sea, debo comunicárselo a mi padre, él fue Doncel de la Corte en su juventud y ahora está a cargo de ellos, él debe saberlo. — le aclaró. — él debe estar al pendiente de todo lo que sucede en la cabeza de nuestros donceles, sus inquietudes, ideas y miedos.

Bueno, lo intentó.

— bueno, arriesgo mi vida en esto, pero soy sublime sobreviviendo a los golpes de la vida. — habló, tragándose todo el té. — el príncipe Cha no tiene la cara así por nada, fui yo. — el rostro de YoungJae se llenó de horror. Vaya salvaje que albergaba en su interior JinYoung. — él había golpeado a la princesa para quitarle su corona, la corona que era de su padre; bueno, creo que era de su padre, es lo que me dijo ella.

— ¿eres consiente de lo que me estás diciendo?

— por supuesto que sí. — contestó. — es mi vida la que está en riesgo y la última vez que sobreviví a algo, fue doloroso, y no quiero repetir esa experiencia.

— bien, tomaré medidas sobre esto. — contestó YoungJae.

— no, no lo haga, aún. — pidió Park. — me temo que EunWoo es un peligro para la nación, así que estoy recolectando evidencia.

— ¿qué es lo que crees de él, acaso? — preguntó, cruzando su pierna derecha sobre la izquierda.

— los padres del príncipe llegaron al palacio y choqué con su madre, de ella cayó una nota con un idioma que no entendía: era japonés, al menos eso me dijo JiSung. — contestó, sacando un papel. — no es lo original, pero vine a este palacio para que hagan una traducción. JiSung me dijo que aquí hay un profesor.

— escucha bien, niño con complejo de rebeldía, si mis sobrinos están en peligro, yo no perderé el tiempo y haré todo lo posible para mantenerlos a salvo.

— es el rey quien tomará la decisión final, así que por eso mantengo este secreto. — le aclaró, inclinándose hacia adelante. — el rey es un buen padre, pero es muy tirano dentro de su propio núcleo familiar, así que debo buscar mucha evidencia para convencerlo de que no se case y que se deshaga de él.

— eres un doncel, no puedes hacerte cargo de eso, debes delegar esto a alguien más. — le indicó el príncipe. Park estrelló su frente contra la mesa por la decepción. — qué salvaje.

— quíteme este título entonces. — contestó desafiante, poniéndose de pie.

— tu enemistad con ese príncipe y los roces que han tenido, me hace pensar que tu odio está creando esta fantástica historia conspirativa.

— no puede ser... — murmuró estresado, masajeando su frente. — bueno, bueno... crea lo que quiera, así puede quitarme el título, pero nadie va a detener mi investigación. La muerte no me da miedo, es mi amiga, es tan buena amiga conmigo que me envió devuelta porque todavía no me quería allí con ella tomando el té.

— sin dudas, te falta mucho para llenar tu papel como Doncel. — el castaño rodó los ojos con indiferencia. — careces de modales y elegancia, pero lo compensas con tu lealtad a mi familia. Guardaré tu secreto, pero si encuentras más pistas, vas a envíarmelas a mí para respaldarlas y así salvar a mi hermano si algo te sucede a ti.

JinYoung gritó de la emoción, lanzándose a darle un fuerte abrazo y un gran beso en la mejilla del príncipe.

— usted me recuerda a ChangMin, muy lindo y tierno, por eso puedo amarlo. — le comentó Park, apretando su mejilla. YoungJae alzó una ceja algo incómodo, poniéndose rojo por el desasosiego. — por cierto, ¿puedo comer algo de verdad? Vamos, hagamos un festín para pasar la decepción.

— bueno, bueno... — murmuró, apartando al doncel sutilmente. — tú ve a la Biblioteca de los Espejos, allí está el maestro de japonés, después vuelves al salón con el resto de los donceles. Mientras estés aquí, vas a ser uno más de mis donceles y te comportarás como tal, yo no tolero la falta de disciplina, así que aquí te enseñaré un par de reglas.

— está bien, está bien. — contestó, agitando sus manos, evidenciando su desinterés en el tema. — bueno, nos vemos.

JinYoung se fue como si nada, pero antes de cruzar esa puerta, volteó y se inclinó. YoungJae iba a enojarse si no hacía eso.

Lim rodó los ojos irritado; tenía mucho que hacer. Ese doncel problemático le quitaría energías, pues debía pulir los modales, la elegancia y la belleza de su aura. Era algo bruto y tosco porque aún era nuevo en este mundo, pero veía un gran potencial en él. 

Ahora, centrándose en el tema que trajo a ese chico hasta acá, esto representaba un enorme problema y la entrada a un conflicto bélico en caso de que no se trate bien esto.

Su hermano, el Rey JaeBeom era un hombre con mano dura para sus enemigos. Las advertencias estaban hechas y su reino contaba con un poder militar bastante fuerte, las defensas eran muy efectivas, no obstante no podían vivir para siempre de ese modo, la situación era delicada, cualquier movimiento en falso podría quebrar la frágil paz que se había establecido, aunque, claro, el castillo de su hermano ya había sido atacado dos veces en las que ese doncel rebelde fue el único que marcó la diferencia entre la guerra y la estabilidad.

YoungJae no confiaba en su cuñado, en absoluto que no, pero poco y nada le puede interesar las decisiones que su hermano tome con respecto a cómo continuar con su vida, sin embargo, el conflicto que le acababa de evidenciar JinYoung ya provocó que el menor ya se viese interesado e involucrado. Como príncipe, su deber era ser la mano derecha del rey, ser su escudo y su espada, y ahora llegó el momento de serlo.

Cuidaría a su familia y a su reino a como dé lugar, pero para eso necesitaba evidencias, luego también comprobar su veracidad. En caso de que EunWoo resulte ser el traidor que JinYoung señala, entonces estaría preparado para actuar en el momento debido.

Solo esperaba que el Doncel sea lo suficientemente maduro como para no evidenciarse tan prontamente. Sin dudas, algo haría con Park para que su inmadurez no comprometa la misión que ya había empezado por cuenta propia.

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Siento no haber actualizado. La U me está comiendo viva y me pegó un bloqueo terrible. Pero aquí hay un granito de arena