1460 días junto a él

Feliz cumpleaños (dia 221)

2 de Abril 2019

A pasado aproximadamente un mes desde que mamá se fue, no e sabido nada de ella, no responde mis llamadas ni mensajes. Durante la semana la pasó en la escuela y algunos fines de semana salgo con Gerry y algunos otros la paso con mis tíos, han sido difíciles los días sin mamá en la solitaria casa de la abuela Miriam. Gerry aún no sabe nada de lo que sucede pero creo que a notado cambios en mi, pues la mayoría de días que me ve llegar a la escuela cabizbaja se acerca a mi con comida o un buen chiste para alegrar mi día, con su compañía es imposible tener un mal día, él es un muchacho que contagia la alegría y buena vibra con tan solo compartir unos minutos con el.
Estoy a 3 meses de terminar la preparatoria y mis trámites universitarios han comenzado en los cuales tía Lupe y tío Miguel me han ayudado, debo mantenerme lo mejor posible pues en poco tiempo presentaré los exámenes.
Hoy 2 de abril es cumpleaños número 19 de Gerry, como casi siempre decidí hacerle un detalle acompañado de un regalo y muchos dulces porque Gerry es como un duendecillo se tiene feliz con dulces.
Al llegar las 12 en punto le envié un bonito mensaje para felicitarlo por su cumpleaños acompañado de una canción, realmente es bello tener un año más de vida. Él se vio agradecido y feliz de mis palabras cursis llenas de miel.
    A la mañana siguiente lo cite en el arbolito del amor una hora antes de entrar a clases para entregarle su regalo y compartir una comida juntos
        — Buenos días al cumpleañero más precioso de la vida, te veo a las 12 en el arbolito del amor 💕
      — Muchas gracias Gema hermosa, nos vemos en un rato más.
Llego la hora de irme y realmente no sabía como iba a hacerle, parecía un burro de carga con mi mochila de la escuela, una enorme caja de regalo y por si fuera poco había encargado una pizza la cual su cuadrada caja no me permitía caminar libremente, iba muy nerviosa de verlo.
Llegue al arbolito del amor a duras penas y apenas y logrando caminar por su puesto Gerry no había llegado pues sabemos que algún defecto tenía que tener ese hombre y la puntualidad no era su fuerte, espere aproximadamente cinco minutos cuando lo vi llegar a lo lejos y mi corazón se aceleró, estaba muy nerviosa.
        — ¡Holaaa precioso! ¡Feliz cunpleaños! Dije mientras lo abrazaba fuertemente — Tengo algo para ti
    — Muchísimas Gracias dijo mientras brillaban sus ojitos de emoción y correspondía a mi abrazo.
    — Ábrelo mi amor, quiero ver si te gusta.
De inmediato abrió su regalo como un niño de cinco años abriendo sus regalos de navidad
De la enorme caja sacó una camisa azul marino con la cual quedó encantado pues su vestimenta siempre involucraba camisas, una caja sus chocolates rellenos favoritos, un pastel para dos personas porque por supuesto le iba a pedir que me compartiera, una manualidad hecha con mucho amor y muchas bolsas de chetos, galletas y dos jugos para acompañar nuestra pizza. Después de abrir su regalo lo dejo en la banca junto al árbol y me abrazo fuerte muy fuerte, me miro a los ojos y me agradeció, en el momento no sabía porque había significado tanto para él, si no hasta después.
     — Bueno joven y guapo cumpleañero es momento de que usted pida su deseo dije mientras sacaba tres pequeñas velas de mi mochila y destapaba su pastel, sus mejillas se pusieron rojas al mencionar esas palabras y procedí a cantar una canción de cumpleaños.
        — Pide tu deseo Gerry o las velas nos ganarán
     — ¡Listo!! Ahora saca los jugos de la caja y vamos a comer esta deliciosa pizza antes de que se enfríe.
     — ¡Aceptó! Dijo entusiasmado — Pero ya sabes campeona mitad y mitad.
Pasamos un rato muy agradable, comimos pastel y pizza juntos, por un momento olvide el dolor que había dejado la ausencia de mi madre, él también parecía estaría pasando muy bien.
Después de una hora nos fuimos a la escuela que estaba a tan solo 3 minutos, íbamos con la barriga igual a la de un cachorro que recién a comido, apenas y podíamos caminar.
Llegando a la escuela su mejor amiga Fanny también lo recibió con un bonito detalle hecho por ella misma el cual era muy bonito y por supuesto también lo hizo muy feliz.
Cuando las clases terminaron Gerry me acompaño con sus enormes cajas a tomar mi transporte.
      Lo abrace fuerte  nuevamente para felicitarlo
  — Gema, muchas gracias de verdad por este detalle y por todos los que has tenido conmigo, de verdad los agradezco y valoro mucho dijo mientras sus ojos se cristalizaban
  Por su parte trate de que fuera feliz y su lágrima no saliera de sus ojos así que lo único que se me ocurrió decirle fue — De nada precioso mañana me traes pastel
      — Pero si ya comimos pastel niña comelona
     — Pero del pastel de tu casa envidioso
    — Es que en mi casa no va a haber pastel, para Graciela es un día normal, ahorita me iré al gimnasio  — Por eso casi no me gusta mi cumpleaños

En ese momento mi corazón se partió en mil pedazos y quería que la tierra me comiera y escupiera en otro lado por mi comentario tan imprudente del cual no sabía que esa sería su respuesta, después de todo creo que así como él no sabía la situación con mamá había cosas que yo no sabía de su relación con su madre.
Me preguntaba a quien rayos no le gustaba su cumpleaños, me sorprendió esa respuesta y más viniendo de él que siempre disfrutaba hasta lo más sencillo.
    Después de 2 horas de haber llegado a casa me llego un inesperado mensaje de Gerry.
      — Hola preciosa ya estoy en casa, ya me medí mi camisa y me queda muy bien, muchas gracias me gusto muchísimo también quiero agradecerte por la comida y en día de hoy, tú hiciste que este día fuera especial.