Mudanza (Dia 604)

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18 de Abril 2020

Una semana después del cumpleaños de Gerry llegó el motivo de las vacaciones del mes de abril que era Semana Santa y desde luego llegue a casa de mis tíos desde el día viernes como lo hacía últimamente, en casa doña esperanza preparo la tradicional comida que se hace en esas fechas y comimos todos en familia, al día siguiente sábado se acostumbra a visitar albercas, playa o cualquier bonito sitio que involucre agua pero recordando la contingencia sanitaria que estamos atravesando es imposible visitar cualquiera de esos lugares ya que no se encuentran disponibles, pero eso no arruinaría los planes de pasar un agradable momento pues algunos días antes mis tíos habían comprado una enorme piscina inflable la cual ya estaba llena de agua en medio del patio.
Después del desayuno todos salimos al centro del lugar en donde vivo en busca de las compras para la comida de la tarde, compramos también algunas cosas que encontramos en el camino como pistolas de agua y cosas que necesitaríamos para más tarde mojarnos, mientras caminábamos por el centro mi celular comenzó a soñar, lo saqué de mi bolsillo y como era de esperarse era Gerry quien me avisaba que había salido de trabajar hace algunos minutos y venía en dirección a casa de mi tía, le aclaré que nos encontrábamos en el centro haciendo las compras así que más tarde llegaría a nuestro encuentro.
   — ¿Ya viene tu otro hijo? Pregunto don Lucio a tía Lupe
Ella accedió con la cabeza y rio ante tal comentario pues últimamente en su familia le hacían bromas acerca de que Gerry y yo éramos sus "adoptados" pues todo el tiempo estábamos con ellos a cualquier lugar a donde fueran.
Cuando Gerry llegó, doña Esperanza continuó con la broma y agregó — Lupe llegaste con uno (refiriéndose a tío Miguel) y ahora ya tienes 3.
   — Si no me pude deshacer de uno ahora menos de los tres continúo la broma
  — Cuando ya no venga me van a extrañar agregó Gerry riendo
  — ¿Quien te mintió? Respondió don Lucio
  — Ya los veré llorar cuando ya no esté aquí dijo Gerry, reímos ante su comentario y continuamos con las compras hasta que terminamos.
Mientras Gerry caminaba hasta enfrente cargando las bolsas de las compras aún lado de doña Esperanza, tía Lupe y yo hasta atrás de todos veníamos comentando acerca de la camisa que traía Gerry que era la que le había dado de cumpleaños
  — Creo que no le atinaste a la talla comentó tía Lupe
  — Le compre la talla de siempre pero últimamente come mucho aquí cuando está con nosotros y aparte antes hacía mucho deporte y ahora con todo esto de la contingencia y de que ya no tiene tiempo por su trabajo y la escuela abandonó el deporte.
Tío Miguel escucho nuestra conversación y de inmediato no dudo en hacerle burla a Gerry para desquitarse ya que Gerry constantemente le hacía burlas a él por el mismo motivo.
   — ¿Que pasó? Creí que éramos amigos respondió Gerry ante tales burlas de parte de mi tío
  — Lo que sucede es que ya no hago nada como antes, pero ya el lunes comienzo mi vida fitness nuevamente.
  — La otra semana nos platicas como te va en tu vida fitness, mentiroso. Comentó tía Lupe.
Cuando llegamos a casa don Lucio metió algunas latas de cerveza a el refrigerador mientras que Gerry metió la carne que más tarde se prepararía en el asador.
Algunos minutos más tarde don Lucio salió al patio de la casa y llamó a Gerry y a tío Miguel quienes ingenuamente salieron de casa para ser traicionados por don Lucio quien arrojó una enorme cubeta de agua sobre ellos.
  — ¿Ya empezamos? Pregunto uno de los empapados hombres
  — Ahorita sacamos a los demás respondió el otro hombre que se encontraba escurriendo de la ropa.
Gerry se acercó a la puerta y me llamó a lo cual después de ver esa escena a través de la ventana por supuesto me negué a salir pues sabía lo que me esperaba, así que como no acepté salir enseguida entró a la casa y como dio lugar me saco cargando mientras yo entré risas suplicaba que no lo hiciera pues seguramente el agua se encontraría fría, súplicas que fueron ignoradas pues segundos más tarde fui arrojada a la piscina, me quedé ahí dentro viendo como todos dentro de la casa iban cayendo uno a uno y terminaban afuera totalmente empapados, la única que aún sobrevivía y se encontraba seca en su totalidad era Anita hasta que de pronto la vimos salir de casa en dirección a las escaleras del segundo piso, tío Miguel y Gerry corrieron hacia ella tomándola uno de los pies y el otro de las manos para arrojarla dentro de la piscina, cuando todos nos encontrábamos más mojados imposible comenzamos a jugar con el agua durante varios minutos, fue un momento sumamente agradable pues me sentía dentro de una familia y al parecer Gerry también.
Cuando el sol comenzaba a ausentarse y el aire frío comenzaba a hacernos temblar doña Esperanza encendió el asador y comenzó a cortar la carne y algunas cebollas, mientras don Lució repartía algunas cervezas y refrescos, Gerry acepto una lata de cerveza lo cual me sorprendía pues yo no se en que momento mi novio comenzó a aceptar alcohol si cuando lo conocí le tenía un enorme rechazo a esas bebidas y no ingería ni una gota así que no me quede con la duda y le pregunté.
  — No me gusta beber pero el ambiente y la convivencia de aquí me gusta mucho así que acepto las bebidas para disfrutar con esta familia no para emborracharme, ademas e visto que cuando beben aquí no son de molestarse o hacerse burla, al contrario se apoyan y se cuidan.
  — Ahora ve a ayudarle a doña Esperanza con lo que está haciendo Gema, no seas como Emily agregó Gerry en voz baja.
A lo cual solo reí y exclamé — Grosero
Dicho comentario lo hizo ya que Emily es la esposa de Aarón el hermano de tía Lupe pero digamos que para la mayoría de las personas que viven ahí Emily no es del agrado de todos ya que en esta familia todos se ayudan entre sí a hacer las labores de casa y ella nunca coopera ni ayuda en nada.
Cuando todo estaba listo comenzamos a comer mientras temblábamos de frío todos ya que aún nos encontrábamos mojados, al finalizar llegó el momento de ir a bañarnos uno a uno para evitar una enfermedad, cuando todos estábamos limpios y secos entramos a casa a jugar nuestro típico juego en el cual como siempre Gerry y yo no ganamos ni un solo peso, nos encontrábamos todos reunidos en la mesa jugando
  — Ya nos hubieran llevado a la cárcel porque aquí somos más de 10 personas y se supone no deben convivir más de 3 y a un metro de distancia comentó Mariand mientras reía
Todos reímos ante su comentario y continuamos nuestro juego.
  — Ya va a empezar TikTak grito Anita desde la sala
  — ¿El TikTak? Pregunto un integrante
  — Si, comenzaría a las 8 en el canal 7
Enseguida solté una risa — ¿Te refieres a Titanic? Una película que todos hemos visto mínimo unas diez veces a lo largo de nuestra vida
  — Ah, si, eso. Respondió Anita
  — Ponla, me gusta mucho esa película agregué
  — Está bien bonita ¿Verdad?
  — Si, solo conozco a una persona rara que no le gusta dije mientras señalaba a Gerry
  — ¿No te gusta? Pregunto Anita sorprendida
  — No, está bien fea, que chiste tiene si no terminan juntos, a mi me gusta en donde si terminan juntos y son felices pero se muere al final eso que, eso no está nada bonito.
  — ¿Ósea lo que no te gusta es que se muere al final?
  — Pues si...
  — Si Anita pon otra película esa la hemos visto mil veces comentó alguna de las hermanas de tía Lupe, así que elegimos una bonita película entre todos y dejamos de jugar para prestar atención a ella.
Después de varias horas la larga película termino, ya era bastante tarde
— ¿Quieres que te vallamos a dejar a tu casa o te quedas a dormir? Pregunto tía Lupe
Sin pensarlo más de dos segundos Gerry respondió — Pues si me permiten quedarme, me quedo.
Así que todos fuimos a nuestros respectivos lugares a dormir.
A la mañana siguiente por ser domingo desperté hasta las 10 de la mañana, me dirigí al baño a lavar mi rostro y colocar un poco de maquillaje para no sentirme tan desarreglada y abrí la puerta, mientras bajaba de las escaleras pude observar a Gerry que se encontraba barriendo el patio
— Buenos días señorita Gema exclamó
— Hola, equipo respondí con vos adormilada aún
— ¿Cual equipo? ¿Cual equipo? Si yo ya hasta regrese y este equipo apenas se va levantando de la cama
— ¿De donde regresaste, mentiroso?
— Fuimos desde las 8 de la mañana al centro Doña Esperanza, Don Lució y yo a comprar lo del desayuno.
— Ya no me regañes y vamos a desayunar respondí y entramos juntos, nos sentamos y todos disfrutamos del desayuno.
—¿Ya terminaste Gema? Pregunto Gerry
— Si, ya fue suficiente, estoy satisfecha.
— ¿Cual satisfecha? Si apenas has comido, anda campeona come más, tú puedes.
No me quedo otra opción más que continuar comiendo, al finalizar nos fuimos a sentar a los sillones de la sala y de inmediato se acercaron los pequeños hermanos Saúl y Raul
— Vamos a jugar Gerry
Así que comenzó a jugar con ellos como lo hacía muy frecuentemente ya que parecía que algo tenía para que los niños pequeños lo siguieran mucho.
— Ya vallan a bañarse muchachos que vamos a salir dijo tía Lupe dirigiéndose a nosotros
— Pero hay contingencia no podemos salir de casa dijo Gerry riendo
— Entonces si hay contingencia que hace aquí y no en su casa jovencito respondió mi tía levantando una ceja
— No es cierto Doña Lupita, ya voy
Mi tía se quedó riendo mientras Gerry subió al segundo piso para darse un baño, por suerte traía ropa limpia y seca en su mochila, así que después de darse un baño yo hice lo mismo y nos colocamos nuestra ropa que utilizamos para los museo, ropa igual.
Al bajar mi tía nos vio — Ridiculos
Siempre nos decía así cuando nos veía vestidos igual, salimos de casa y subimos a la camioneta, nos dirigimos a casa de una amiga de tía Lupe ya que algunos días antes había nacido su bebé y fuimos de visita para conocerla, cuando llegamos a casa de su amiga ella nos ofreció un jugo, ella siempre ofrecía jugos a quien la visitaba, saludamos a la nueva mamá y tía Lupe presentó a Gerry ya que a él no lo conocía, estuvimos por varias horas ahí hasta que comenzó a hacerse tarde y volvimos a casa justo a la hora de la comida.
Durante la semana llegó un día el cual me deprimía mucho que fue el cumpleaños de mi mamá ya que ella se encontraba en quien sabe qué lugar y ni siquiera un abrazo podría darle así que toda esa noche me fue casi imposible dormir y las pocas horas que dormí desperté a las 6 de la mañana, mire el techo de mi habitación durante varios minutos hasta que se me ocurrió una alocada idea, la habitación de mi mamá que llevaba varios meses en el total abandono se haría fea si seguía sin habitarse, incluso ya se encontraba llena de polvo así que me levanté de la cama y pedí permiso a mi abuela Miriam si podía mudarme de cuarto y trasladar mi cama y todas mis cosa a esa habitación a lo cual ella no sono del todo convencida pero finalmente acepto así que comenzó todo y como primer paso coloque mi celular a todo volumen con música deprimente ya que me sentía triste y que mejor acompañante para la tristeza que música aún más triste, me dirigí a la habitación de mamá y comencé por hacer un total y profundo aseo ahí dentro ya que habían pasado meses desde que una escoba no pasaba por ese lugar, cuando el sitio quedó impecable sin un rastro de polvo llegó la hora de la mudanza y comencé llevando los muebles más grandes, admito que eran muy pesados pero me las ingenié como fue posible y los cargué sola ya que a esta hora ya no se encontraba nadie en casa, cuando termine de pasar los muebles comencé con la ropa ya que debía trasladarla hacia el closet lo cual también fue un trabajo muy tardado, me tarde casi el día entero en esa mudanza aunque creí que sería rápido no fue trabajo fácil, después de terminar todo me mire al espejo y noté que me encontraba muy sucia pues ni siquiera me había bañado en el día entero así que me dirigí a mi habitación nueva tomé mi toalla y fui directo a la regadera a darme un largo baño, al salir me puse una cómoda pijama y me acoste sobre la cama, lloré un poco por no pasar el cumpleaños de mamá a su lado hasta que a lo lejos escuché que mi celular se encontraba sonando, corrí hacia él y respondí, era Gerry
— Hola preciosa, podrías abrirme estoy afuera de tu casa
Mi corazón se detuvo por unos segundos y lo más rápido que me fue posible cambié mi pijama por ropa decente y coloque maquillaje exprés sobre mi cara, salí corriendo y abrí la puerta.
Lo mire y lo abrace
— ¿Como estas, preciosa? Sabía que sería un día difícil para ti y pensé en venir a verte después del trabajo y como estoy casi seguro que no has comido nada durante el día traje unas ricas hamburguesas y tú jugo favorito.
Sonreí ante tal gesto y lo invité a pasar a casa, cuando entró él iba en dirección a mi antigua habitación pero lo detuve y le expliqué que durante el día había hecho una larga mudanza
— Ay niña, eres muy ocurrente, creo que esto supera lo de pintar tu habitación a las tres de la mañana.
Ambos entramos a la nueva habitación y nos sentamos sobre la cama, destapamos las hamburguesas y comimos mientras platicábamos acerca de cómo había sido nuestro día.
— Gema ¿Quieres ver lo que instale en mi celular?
Lo mire y dije que si con la cabeza
— Instale Liktun
Comencé a reír después de eso pues Liktun es una aplicación para hacer videos cortos en donde puedes agregar música o sonidos de fondo, esa aplicación comenzó a hacerse bastante popular cuando el aislamiento comenzó ya que esta red social servía como distracción para quienes se encontraban el día entero en casa.
— Vamos a grabar algunos video
— De acuerdo ¡¡¡acepto!!!
Cuando llegó la noche Gerry tenía que volver a casa pues el regreso no era tan corto y ya era tarde así que me abrazo con todas sus fuerzas
— Estoy contigo preciosa, quiero verte bien, siempre bien.
— Gracias por venir.

1460 días junto a él Where stories live. Discover now