Libro de un homosexual

108. Bang Bang

Corina

2 de Agosto, 6:21 AM

Las ceremonias de graduación eran mi parte favorita de los años escolares, ya que habían fiestas gigantes, comida por montones (Aunque mi mamá no me permitía comer mucho de eso, decía que me volvería gorda y nadie me querría), pero ahora que me toca a mi ser la que se gradúa, me siento como una puta mierda.

El estrés que hay en este puto colegio es increíble, los profesores corren de aquí para allá en el salón de fiestas, las luces están apenas encendiéndose, hay bebés llorando por todas partes, les juro que en estos momentos estoy pensando seriamente en irme de aquí y retirar mi título por secretaria mañana, que pereza de verdad

-¡Bueno chicos, adelante, ya pueden pasar!- Comenta la directora dejándonos ver la decoración del salón de fiestas

El dorado y el azul predominan, con ligeros toques de plateado, las bambalinas azules se ven hermosas, junto con los globos dorados pegados del techo, haciendo que cuando mires arriba  parezcan estrellas, al menos se esforzaron en esto de la decoración, porque lo de las fotos fue un fiasco

Quien diría que este es el mejor colegio de lechería

Al sentarnos en dónde nos corresponde, la directora sube al podio dedicandonos unas palabras de apoyo, o de supuesto apoyo, ya que se pasó todo el año diciendo que no llegaríamos a nada y que somos unos vagos hijos de papi y mami, en fin, la hipocresía de la educación

Al terminar su discurso, entonamos el tedioso himno nacional todos juntos, media hora que tardamos en hacer eso para que luego empiecen a llamar alumno por alumno, dando algunos apretones de mano, recibiendo el título y la medalla luego de un par de fotos. Yo volteo en busca de mi madre, y la veo junto a mis hermanos en una de las sillas extras, sonriendome mientras levanta sus dos pulgares. Miro el asiento vacío que está a su lado, dónde debería estar mi padre

Hace mucho que no se de el, mi mamá aún confía en que el volverá y tendremos "Una familia", sin darse cuenta que hay días en que el siquiera se preocupa por sus otros tres hijos. A hombres como mi papá hay que castrarlos, quisiera poder hacerlo yo misma si llega a ser posible

-¡Corina Sickles!- Anuncian por el micrófono y yo me levanto emocionada al salir de mis pensamientos, la toga es supremamente incomoda pero eso no me detiene de posar y sonreír para todas las fotos que me toman, cuando estoy a punto de bajar, la directora me detiene con un abrazo muy falso -Tu darás un discurso al final, prepárate- Refuta con una sonrisa falsa en mi cara, me quiere poner en ridículo, y lo que no sabe es que yo siempre estoy preparada

Asiento con una sonrisa falsa antes de bajar y quitarme la toga y dejarme el birrete personalizado que hice, las entregas terminan y empiezan a pasarnos copas de champagne a todos. Nos reunimos en el centro y brindamos a nuestra salud y nuestro éxito, sabiendo que más de uno de aquí simplemente se quedará trabajando con sus padres

Yo no, estudiaré medicina y seré bióloga médica, es mi sueño desde que tengo 15 y siempre lo será

-Ahora, nuestra alumna Corina Sickles, nos dedicará un pequeño discurso- Comenta la directora al micrófono y yo sonrío con la copa de champagne en la mano

-Bueno, por ahí dicen que las situaciones que se sienten irreales son las metas que logras. Yo no sé ustedes, pero yo siento que subí el monte Everest- Empiezo yo, ganando una carcajada de todos -Pero por sobre eso, no saben lo agradecida que estoy de haber luchado todo este año con ustedes chicos. Todas esas noches de insomnio haciendo trabajos a últimas horas, todos esos momentos tristes en los que el salón se sentía desanimado porque no tuvimos el rendimiento necesario en alguna prueba, rindieron frutos, porque ahora, todos nosotros, somos dueños de nuestro futuro, y les pido por favor que tomen buenas decisiones por qué no quiero verlos a ninguno en el centro pidiendo limosna, grácias- Comento yo con gracia antes de que todos aplaudan con euforia, la directora me mira con un falso orgullo, y yo bajo con la mirada en alto, abrazando a mis compañeros y compañeras