Libro de un homosexual

163. Un trío apoteósico

Fran

13 de Noviembre, 6:24 PM

-Admito que antes me caías mal, al principio de conocernos- Comento tomando un sorbo de mi copa de vino

-¿Es que acaso le caí mal a todo el grupo de Lucc?- Inquiere Andrea con una sonrisa

Ella es la única que sabe de Laura en realidad, lo cual a estas alturas ya es un poco vergonzoso, se podría decir que aunque no pasamos la noche juntos, fue algo muy raro haber estado junto a ella

-¿Nos quedaremos bebiendo vino o saldremos un rato?- Pregunto con curiosidad

-Es que no lo sé, ¿Solo tu y yo?- Inquiere y yo asiento -Me da miedo que empieces a besarme- Refuta riéndose descontroladamente

-¡IDIOTA!- Exclamo riéndome con ella, al mismo tiempo que me ruborizo por completo

-Ya enserio, ¿Ella y tu ya dejaron de hablar?- Pregunta con curiosidad y una sonrisa curiosa

-Bueno, yo con ella si, pero ella conmigo...- Explico dejando la oración a la mitad, ella da una cara de entendimiento antes de mirarme con compasión

-Si de verdad no quieres nada con esa chica, deberías al menos decírselo- Comenta un poco avergonzada -Tenemos un ejemplo cerca de lo que pasa cuando ilusionas a alguien- Refuta haciendo alusión a Lucc, yo asiento con entendimiento antes de que el silencio pensativo invada la sala

-¿Le dirás a Lindy?- Pregunto yo en su dirección

-Esta en una cita, pero le diré a Alejandro que vaya con nosotras- Responde antes de tomar su teléfono y levantarse del sofá

-¿Ese no fue el chico que se durmió luego de fumarse un porrito y tener sexo contigo?- Inquiero hablando demasiado

-¡SI NO MATO A SAMUEL POR LO DE LUCC, LO MATO POR CHISMOSO!- Exclama dándose cuenta que me lo contó, yo empiezo a reír descontroladamente mientras me levanto y voy a cambiarme los zapatos

-Algo me dice que ese día tuviste mucho miedo- Comento desde el cuarto

-Y que lo digas, y todos estaban dormidos, incluso el, si no es porque Lucc duerme con el celular con sonido no hubiera salido viva de ahí- Responde con una sonrisa asomándose en la puerta, recostandose del marco con una sonrisa

-Bueno, estamos listas, vámonos- Acoto luego de retocarme el maquillaje, se podría decir que llevábamos un buen rato estando listas pero por estar charlando nos quedamos así

-Alejandro nos verá en Steel- Comenta Andrea subiéndose al Jeep, yo asiento antes de encender el Jeep y salimos de la casa rápidamente

Aunque estoy pagando la renta del departamento, se podría decir que no me gusta mucho estar ahí, me recuerda mucho a Jesús, el que quería con Lucc y conmigo, aunque más conmigo que con Lucc. Y aún así, mi mamá está sola más tiempo del que debería ya que mi hermana se mudó, y aunque viene aveces, me da miedo que se quede tanto tiempo sola

Al estar cerca de Steel, Alejandro nos llama para decirnos que está dentro, y que digamos su apellido para entrar al lugar que reservó. Steel inauguró una especie de zona de reservas en el piso de Terra, es exactamente lo mismo, solo que tienes más espacio y lo que pidas a partir de reservar ahí es gratis, las bebidas, los aperitivos que al parecer son los que menos venden ya que mi amigo que es gerente de ahí me lo dijo