🍁 𝓔𝓵 𝓣𝓮𝓼𝓸𝓻𝓸 𝓭𝓮 𝓜𝓲𝓷 𝓨𝓸𝓸𝓷𝓰𝓲 🍁 [Yoonmin]

† Capitulo XXXVII †

Con lentitud Yoongi se separó de los labios del doncel, mirando que Jimin tenía sus ojos llenos de lágrimas.

–no llores– susurro –todo está bien amor mío– Jimin no lo resistió más, abrazo a Yoongi con fuerza, enterrando su rostro contra su cuello.

Yoongi ciño sus brazos al rededor de la cintura del doncel, como si fuera una prisión de acero, para que el no pudiera salir. Lo levanto del suelo, para llamar la atención de Jimin y volver a besarlo.

Mientras el relinchar de otro caballo llamo su atención. Ambos se separaron, mirando a Hoseok y a Jungkook bajar del caballo: Yoongi se había adelantado a ellos.

Jimin miro a Jungkook, el cual tenía los ojos llenos de lágrimas, camino lentamente hacia delante; Yoongi seguía tomando su mano y no la soltó, hasta que Jimin se alejo lo suficientemente.

Jungkook miro al doncel, para entonces correr hacia el y abrazarlo con fuerza. Jimin correspondío el abrazo, escuchando los sollozos de Jungkook: el solo era un niño, un niño que no tenía necesidad de pasar por eso, pero el destino era injusto.

Hoseok camino hacia Yoongi, mirando con lastima como el chico de ojos grises, se aferraba al doncel.

Taehyung bajo del barco corriendo, Hoseok lo miro, esperando que viniera a el, pero el chico se ojos dorados lo paso de largo, uniéndose al abrazo de Jimin y Jungkook: habia formado un vínculo con ellos, que dudaba volviera a encontrar con otra persona.

Yoongi miro a los tres chicos y luego a Hoseok a su lado, volteo el rostro, mirando el amanecer reflejarse en el agua, con el sol saliendo poco a poco.

–zarpemos– dijo Yoongi, colocando su mano en el hombro de Hoseok, para luego comenzar a caminar al barco.

Jimin miro a Yoongi subir y luego a Hoseok comenzar a seguirlo.

–¡Jimin!– llamo Yoongi lo bastante fuerte para que lo oyera.

Tomo la mano de Jungkook y lo miro, el menor tenía los ojos rojos producto del llanto. Miro hacia atrás; sabiendo que ya no le quedaba nada, miro al mar: dónde le esperaba un todo. Finalmente miro a Yoongi, que estaba al borde del barco, este volteo, mirando en sus ojos azules un sentimiento de súplica.

–vamos– dijo Jimin, comenzando a caminar, jalando a Jungkook, con Taehyung siguiéndolos.

El mar siempre sería su destino, ir mas allá del horizonte era lo que debía hacer. Su destino era Yoongi...

Yoongi miro al doncel, el cual permanecía recargado en la baranda, mirando al puerto.

Se habían alejado varias leguas de la costa del caribe, llendo cada ves más mar a dentro. Tarde o temprano la costa se perdería de su vista.

Jungkook estaba sentado, en el mástil central horizontal de la popa. Hoseok estaba verificando las amarras y Taehyung estaba hasta arriba en el carajo, por voluntad propia.