Capítulo 17

10.6K 694 71
                                    

Montecarlo, Mónaco

Charlie

Un toque en la puerta interrumpió el caos de cajas y desorden en medio de mi mudanza.

Un momento Grité mientras corría a abrir, y allí estaba él, el dueño de mis últimos sueños, aquel con quien había hecho un trato que me llevaba a sonreír sin remedio.

Si sigues mirándome así, no voy a responderBromea,  mientras abría la puerta y lo dejaba pasar.

— Idiota Agregué con una risa, Max mira mi desordenperdón el desorden estoy empacando para la mudanza.

— No te preocupes.

Escucho pasos y Bobby viene a toda velocidad, pidinedo cariños a Max. Él claramente no lo habia olvidado desde la primera que se vieron.

Max se agachá y acaricia a mi pastor alemán, la emoción de mi perro es evidente.

—Hola, amigo— Ante esas palabras Bobby, emite un gran ladrido—también me da gusto verte.

— Le caes muy bien a Bobby— Comentó, intrigada por esta conexión que hay entre ellos dos.

— Normal, soy un tipo agradable— Respondió Max, mientras su mirada va a varios puntos de mi departamento, es la primera vez que lo observa detalladamente.

— Tienes un gran ego, Maxi.

— ¿Maxi?

— Un diminutivo de tu nombre, se le llama apodos— Explicó.

—Me gusta —Se acercá lentamente a mi—aunque no suelo dejar que la gente me ponga ese tipo de apodos.

— Pero te dicen supermax o madmax en el trabajo.

—Tú misma lo dijiste es en el trabajo pero en lo personal, no me gustan.

— ¿Entonces no te puedo llamar Maxi?

— Tú me puedes llamar como quieras, contigo claramente estoy haciendo una excepción— Sus manos en mi cintura, envian una corriente de calor inexpicable.

Estoy a punto de decir algo más cuando sus labios se unieron a los los míos. Decido tomar la iniciativa y lo llevo al sofá del salón principal, cayendo sobre él. Desde aquel primer beso después de la fiesta, algo se activó en mí, y desde entonces, no podía dejar de imaginar volver a besarlo.

Max se estaba volviendo irresistible y, con todo lo del trato que habíamos hecho, planeaba disfrutar de esta diversión sin etiquetas.

— ¿ No tenías que empacar? — Menciona mientras deja pequeños besos en mi cuello.

— ¿ No me quieres ayudar? — Pregunto, devolviéndole el gestos de los besos en el cuello.

— Haría cualquier cosa por ti—Responde, desencadenando una serie de sensaciones mientras sus manos recorren mi cuerpo.

Estoy a punto de alcanzar sus abdominales cuando el sonido de la peurta me distrae de mi misión.

—No abras—Me detiene antes de que me levante.

—Puede ser la comida que pedí — Especulé, dejo un beso corto en sus labios y me dirigo hacia la puerta—no tardo, Maxi.

Cuando abro la puerta, mi sonrisa se desvaneció al ver a mi ex parado frente a mí.

— Antes de que me cierres la puerta, escúchame— Ruega.

—No tengo nada que escucharte— Respondo fríamente—no entiendes que no quiero verte nunca más en mi vida.

Wildest Dreams - Max VerstappenWhere stories live. Discover now