Eclerion: El Legado del Rey

Capítulo 7: Kantira

Para llegar a Kantira tuvieron que cruzar el bosque y tardaron varios días en atravesar las montañas para evitar el sendero principal que llevaba a la ciudad.

Kantira era una ciudad sombría, el clima era lluvioso la mayor parte del año y su gente vivía en gran contraste entre la riqueza y la pobreza. Tenían magnificas y esplendorosas construcciones cerca de las zonas proletarias. Los ricos se regocijaban en su opulencia mientras que los pobres vivían en las calles, algunos más afortunados tenían casas con techos de lámina. La clase media eran los afortunados que podían trabajar para los ricos aspirando a una mejor vida dentro de sus hogares.  Sin importar la clase social, las personas eran frías y hostiles, desconfiaban de todos y solo se preocupaban por sí mismas.

Antes de ingresar, Aleck habló con Shana, para que por ningún motivo se quitara la capucha, lo bueno era que el clima les favorecía para parecer menos sospechosos. Intentaron preguntar a diversas personas que encontraron en la ciudad por Darren, pero la gente era grosera y evitaba hablar con desconocidos.

—¿Qué acaso nadie es amable en este lugar? —musitó Shana desgastada.

—No nos han servido de nada, pero creo que ya sé dónde podemos encontrar a Darren.

Aleck señaló un cartel donde se anunciaba un gran espectáculo "Darren Castia, el único espectáculo de magia en todo Eclerion". El cartel también venía con el lugar y los horarios.

—"Teatro del Arca, 8pm" —leyó Shana en voz alta.

—Vi señalamientos del teatro mientras recorríamos la ciudad, tenemos que hablar con él antes del espectáculo.

Shana y Aleck se apresuraron a llegar al Teatro del Arca, este era un enorme y lujoso recito donde se presentaban varias obras simultáneamente, además, era el único teatro que quedaba en todo Eclerion, la actuación había perdido popularidad al únicamente ser accesible para los ricos. Desgraciadamente, Aleck y Shana tampoco contaban con mucho dinero por lo que no podían comprar entradas, entonces optaron por encontrar la manera de colarse a los camerinos, caminaron alrededor del teatro cuando vieron a algunos de los actores entrar por una entrada trasera, la puerta se había quedado abierta para darle acceso a uno de los repartidores de vestuario, Shana y Aleck aprovecharon la oportunidad para infiltrarse.

Entraron sigilosamente y trataron de pasar inadvertidos, pero mientras buscaban el camerino de Darren, Shana se tropezó con uno de los actores.

—¿Qué acaso no te fijas por donde caminas? —le dijo molesto el actor.

—Lo siento —contestó Shana.

La caída había hecho que se le bajara la capucha revelando su rostro y cabello.

—¡Tú eres...! —tartamudeó sorprendido el actor al verla.

Aleck tenía que pensar en algo rápido, los acababan de descubrir.

—       Lo siento muchísimo. —Se disculpó el actor ayudándola a levantarse—. No esperaba encontrarme con la actriz principal aquí, señorita Faye, lamento haber sido tan grosero con usted. Yo he admirado su carrera desde sus comienzos y si no fuera molestia, me encantaría llevarla a cenar en cuanto la obra acabe.

La actitud de aquel actor había cambiado completamente de un segundo al otro. Entonces Aleck y Shana vieron que, en algunos de los carteles a su alrededor, había una obra de teatro infantil donde la protagonista era una princesa que llevaba una peluca del mismo color rosa que el cabello de Shana. Ella se mostró confundida, principalmente no sabía cómo responder aquella invitación.

—La señorita Faye se encuentra bien, ahora si me permite —dijo Aleck quitando la mano del actor de la de Shana - la llevaré a su camerino para que descanse antes de la obra.