¿por qué ella sí? ; enzo fernández

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Narra Giselle, Buenos Aires.

Volví de Italia hace unos días y con Joaquín todo seguía igual a pesar de que fui con una esperanza de que podamos intentar arreglar algo tan lindo como nuestra relación, todo esto también le afecta de forma negativa a mi hija que a veces llora porque extraña vivir con él y convivir con su papá. Estoy pensando en ir a Italia permanentemente sólo por Lionella, no porque yo quiera. Es algo que necesito pensar.

Desde que peleamos con Joaquin esa vez todo quedó peor, ahí me di cuenta que no le podía reclamar más nada. En toda nuestra relación nunca lo hice y seguro es algo que le molesta, ese día se quedó un rato enorme abrazado a Lio y ella prendida a él con su cara escondida en el cuello de Joaquín. Mis ojos rebalsaron en lágrimas porque no se querían separar y durante el viaje Lio vino callada y a veces se ponía a llorar. Y yo no puedo explicar lo que me rompe el corazón verla así.

Mientras pienso estoy arreglándome para salir, con Lionella en el jardín y la tarde libre me llegó un mensaje totalmente inesperado. Me escribió Valentina, la mujer o ex mujer de Enzo pidiéndome que por favor nos veamos en algún lado, no veía ninguna intención mala de su parte y me habló bien así que acepté. Cuándo salía de mi casa me mandó un mensaje diciéndome que ya estaba ahí. Intenté apurarme lo más que pude.

Me intriga muchísimo saber que es lo que quiere o para que me citó en ese lugar, no me da buena espina pero ahora lo iba a averiguar, no descarté la posibilidad de que tenga que ver con Enzo o algo así. Llegué al lugar y cuándo entré la busqué con la mirada.

— Hola. ¿Valentina? — Pregunté llamando su atención que estaba centrada en su celular. Al verme se paró para saludarme y nos sentamos las 2.

— ¿Cómo estás? — Dijo sonriendo.

— Bien, ¿vos?

Fue una conversación medio corta que tuvimos, forzada al 100% y muy incómoda.

— ¿Qué pasó? — Fui directo al grano no soportando más la situación.

— Quiero hablarte de algo muy importante.

— Decime. — Insistí en que se apure.

Valentina acomodó su pelo para atrás como si se estuviera preparando para lo que iba a decir, tomó postura y me miró fijamente. Me empecé a sentir incómoda, bastante.

— ¿Vos estás saliendo con Joaquín, o no? — Preguntó. Arquee una ceja intentando descifrar su punto y la verdad que no podía.

— Salía. No sé, complicado. ¿Por qué?

— Quería saber. Me enteré de que ahora está con otra y que van a tener un hijo.

Que diga eso me cayó como un balde helado con agua. Que se metía esta.

Asentí con la cabeza mirándola esperando que diga algo más.

— Y lo siento mucho, yo también sé lo que se siente enterarte que la persona que amás tiene otra hija.

— ¿A qué querés llegar Valentina? Enzo tuvo una hija conmigo y se fue con vos. ¿Qué te querés hacer la víctima? — Me empecé a exhaltar.

— No sé para que volviste de Italia, por tu culpa está pasando todo esto, por tu culpa Enzo ya no me quiere y dejó de ver a Olivia tanto como antes. Ya casi no le da bola por vos.