Esencia✔

52- Todo bien

Vanessa
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—¡No usaré tangas! —me cruzo de brazos poniéndole mala cara a mi mejor amigo.

—¡Vanessa! En el campamento fue lo mismo. Mi vida hermosa, tú eres perfecta, por Dios.

—Estaré incómoda si voy en ropa interior a la playa, y no iré en ropa interior porque no.

—Pff, vale, has lo que quieras, ponte tú abrigo y suda como loca.

—Pues lo haré, tontis —ruedo mis ojos y me pongo mi abrigo, luego junto a él salgo de la casa y tomamos el bus para ir a la casa de Bryan.

Hoy es el último día de descanso, ya mañana comienza la preparatoria y bueno, clases de nuevo.

Y Melissa se va a la universidad.

Aunque ella va a viajar porque su papá es profesor allí y viaja todos los días.

Suerte de algunos, y nosotros también tendremos esa suerte, jeje.

—¿Loco no? Llegar al último año de la preparatoria —Henry eleva ambas cejas.

—Pues sí, creí que me quedaría en el mismo año. Matemáticas no es lo mío, y jamás lo será.

—Y este año son cosas nuevas.

—¡Dejemos ese tema hasta ahí! Disfrutemos de hoy, mañana ya será otro día.

—Pues sí, tienes toda la razón.

—Siempre.

El bus se detiene y nosotros bajamos para encontrarnos con Bryan, Víctor y una Melissa en bikini.

—¡¿Qué haces con abrigo?! —la morena se cruza de brazos frente a mí.

—Pues no andaré con tanga en la playa.

—¡No es tanga, Vane, es bikini!

—Es lo mismo, Mel. No me gusta que me vean así.

—Bueno, tú te lo pierdes, a lo mejor aparece un viejito millonario.

—Ya tengo a uno —señalo a Bryan y este abre sus ojos de par en par.

—¡¿Y nos vamos o qué?! —Víctor nos pregunta y Bryan asiente.

Entramos a su auto y así comienza el día.

En la radio comienza a sonar música de la que le gusta a Melissa, de esas de perrear hasta perder los huesos y mi mejor amigo junto a ella comienzan a cantar.

Y a Henry no le gustaban las canciones en español...

Hoy la playa se encuentra llena de personas. La mayoría aprovechando el día de hoy porque se acaban las vacaciones, las otras se vienen a despedir de sus amigos porque se van a la universidad.

Salimos del auto y vamos a un lugar que esté sin personas, aunque es imposible, esto parece un carnaval.

El mar siempre me ha parecido un lugar tranquilo, junto a el sol, las personas que siempre han estado contigo y son tus verdaderos amigos, la persona que amas y bueno, estar contigo misma es algo perfecto para venir y mirar el mar, cerrar los ojos y escuchar las olas, el aire danzar en tu cabello y cuerpo y sentir la arena debajo de tus pies.

—¡Ay, que hermoso todo! —Melissa chilla y comienza a correr hasta una palmera que está sin nadie debajo.— ¡Me siento Moana!

—¿Moana? —frunzo mi ceño.

—¡Sí!

—Estás bien loca, Melissa—Víctor le asegura—. Sólo te falta alguien que se parezca a Maui.