Capítulo 30

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NARRA LUISA

Despierto y veo a Christine en mi sofá, duerme con un cojín entre sus piernas, ella se quedó conmigo. La despierto con suavidad.

Chris: Disculpa- susurra- me dormí, ¿qué hora es?- recuerda que es su día libre y suspira, me río un poco.

Luisa: Tengo que ir a trabajar, te llevaré a casa- asiente.

Mientras ella se alista, me ducho y me arreglo, en toda la noche miré mi teléfono, Becky me había escrito un par de mensajes.

"Extraño dormir contigo"

"Me da un poco de vergüenza admitirlo"- sonrío.

"Buenas noches"

"Buenos días espero que hayas descansado me dormí recién cene, yo también extrañe dormir contigo"- arrojo el móvil, que me pasa, niego y me visto.

Cuando termino cojo mi maletín, llevo a Chris a casa de tía Julia y se despide un poco rara con la mano. Tuve que contenerme para no besarla en ese momento. Amistad. Voy al trabajo, el día pasa como siempre, rápido y así una semana.

Voy a mi oficina, he estado ocupada con todos los casos. Becky me esperaba en mi oficina, con unos papeles.

Becky: Hola, tengo esto para ti- me enseña un nuevo caso- hasta luego- agarro su brazo.

Luisa: No- me acerco- no te vayas, lo siento por estar tan distante nunca supe lo duro que es este trabajo- suspira.

Becky: Tranquila, solo esperaba una explicación, pensé que hice algo malo- me acaricia la mano.

Luisa: Ven esta noche conmigo después de salir con estos- asiente, la acerco y nos damos un besito- te extrañe.

El día se hizo largo, tengo ganas de estar con Becky. Mi teléfono empezó a sonar, Christine.

Chris: ¿Qué tal?- habla mientras escucho batir algo- te llamaba porque estaba buscando una canción que me enseñaste el otro día y no recuerdo cual era...- se ríe- te la canto nanananana tararara- me río.

Luisa: Tengo una playlist en mi perfil que seguramente te guste y la encuentres- me sentía bien cuando se interesaban sobre mi gusto musical.

Chris: Eres la mejor, gracias- antes de que cuelgue.

Luisa: Espera, no cuelgues- dejo de teclear el ordenador- te apetece comer mañana conmigo- escucho como para de hacer lo que hace.

Chris: Claro, justo es mi día libre podemos ir a donde desees, esta vez elige tú una comida que te guste- sonrío.

Luisa: Hecho, mañana nos vemos.

Chris: Cuídate- lanza un beso y cuelga.

Christine siempre tan efusiva en mi, era capaz de hacerme olvidarme de aquello que debía hacer, como ahora mismo. Terminé la jornada y Becky me esperó junto a mi despacho hablando con un compañero Chuck. Cuando me vió se despidió de él, fui al ascensor con ella, en él nos dimos nuestros primeros besos de la noche. Sólo quería estar con ella y dormir juntas. Llegamos al bar con los demás, todos hablaban de sus casos, lo cansados que se veían de aguantar clientes idiotas.

De pronto, recibo una llamada de mamá. La cojo un poco alejada.

Mamá: Hola cielo, Jade y Sam están a cargo de Enzo, estamos en casa de tía Julia y me llamó para decirme que tiene un poco de fiebre, ¿podrías acercarte?

Luisa: Claro, no tardo- me despido de todos y le mando un mensaje a Becky para que venga conmigo.

Becky: Esto a que viene- se extraña cuando entramos en el coche.

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