Emperatriz | Finalizada

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 38 | 𝗙𝗿𝘂𝘀𝘁𝗿𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻

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Los rugidos, gritos y la sangre poco a poco fueron cesando por completo a medida que los monstruos eran derrotados uno por uno. Bavilo se fue a una de las zonas mas problemáticas del imperio que menos protección tenia para poder ayudar a los mas desprotegidos junto con Haun Baek, esto ultimo por orden de su hermana que no permitió que fuera solo por miedo a que le pasara algo.

¡Príncipe Bavilo, esta zona está completamente despejada!

El grito de Haun lo despertó de sus pensamientos, el hombre estaba vestido con su ropa militar de Darhan y no con la túnica de la ceremonia, tenia la katana goteando sangre de distintos monstruos y se alzaba frente a sus cadáveres sin un solo rasguños.

—«Sin duda un hombre muy talentoso, me alegra que él sea el guardaespaldas de mi hermana» —pensó Bavilo satisfecho mientras guardaba su espada en la funda—

El también se cambio de ropa con magia apenas tuvo la oportunidad, recordando todo lo que Alice peleo para hacer unas túnicas dignas de ellos no quería estropearla. Tenia su ropa militar un poco sucia debido a la inexperiencia en un campo real de batalla pero no tenia heridas lo cual para él fue un logro.

—Buen trabajo, terminemos de ayudar a las personas con lo que necesiten y luego vayamos con mi hermana —le dijo Bavilo acercándose a Haun—

—Si mi príncipe —asintió Haun sin protestar—

En todo lo que duro el encuentro Haun noto que el hermano de su amada era una persona muy fuerte, era un gran guerrero y estaba seguro de que seguiría creciendo para convertirse en uno aún más poderoso si seguía el camino que estaba llevando hasta ahora y eso lo hizo feliz.

Por otro lado, su corazón no dejaba de pensar en su princesa, el separarse de ella siendo su guardaespaldas no le gustaba, pero tuvo que acatar su orden sin chistar, pero eso no dejaba ese extraño cosquilleo de preocupación en su corazón.

—«Por favor princesa...manténganse a salvo...»

[...]

Impotencia, ese era el sentimiento que sentía la segunda princesa de Arbezela ahora mismo por la situación en la que estaba y a quien sin quererlo termino metiendo en este problema. Es escandalo que hizo Ariana no paro desapercibido por nadie, no paro de arrastrar con fuerza todo el camino aun llena de sangre de sus pacientes en su ropa y manos lo que llamaba poderosamente la atención pero eso no fue lo peor.

¡Princesa Yvie!

La voz de Nell resonó con fuerza desde la lejanía antes de que apareciera transformado en humano nuevamente con una expresión de preocupación muy notoria, fue tanta la sorpresa que hasta Ariana termino soltando el agarre en su brazo permitiendo así que el hombre la examinara.

—¿¡Nell!? ¿Que haces aquí? —pregunto Yvie genuinamente confundida—

Había mandando a Nell a uno de los frentes de batalla, no pensó jamás que el llegaría tan rápido.

—Vine tan rápido como pude cuando me enteré de lo que había sucedido ¿Esta usted bien?

Mientras ellos dos hablaban Raymond noto como la princesa Ariana estaba temblando levemente con la mandíbula apretada, estaba llena de ira porque esto confirmaba que el líder de la Casa Phantom no acepto ser su joya por ella y los lazos que los unían, a este punto estaba tan histérica que hasta Raymond tenia miedo de que se le reventara una vena.

—¡ERES UN HOMBRE ESTUPIDO, NELL PHANTOM! —aseguro Ariana completamente colérica—

—Ariana, guarda silencio —le dijo Yvie lo mas tranquila que pudo mientras que Nell le colocaba su chaqueta encogida con magia para tapar su ropa manchada de sangre—