064. Farah Karim

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Título: la guarida de la leona.

Publicado originalmente en tumblr por: fatal-iistic

Traducción por: winterbirra

Palabras: 1841

Emparejamientos: Farah Karim x Lectora (escrito como mujer pero podría percibirse como género neutro)

Resumen: Eres un tonto imprudente. Nadie hubiera previsto que ese soldado sustituto de los Luchadores por la Libertad de Urzikstan captaría el afecto de su comandante.

Nota del autor/ra: ninguna.

Advertencias: Sangre, sangre, guerra, Farah Karim es en realidad una mujer soft, soft y fluff.

Estas viva.

Pero también podrías estar muerta.

No hay manera de que Farah me perdone por esto.

Órdenes estrictas. La comandante Karim no se tomaba la insubordinación a la ligera; tal vez no fuera una tirana como Barkov o el régimen de al-Qatala, pero exigía orden y respeto. Y eres conocida por superar esos límites. Es un milagro que, después de tres años de luchar junto a Farah y sus Luchadores por la Libertad, no te hayan despedido amablemente.

Después de todo, eres un sustituto de su causa.

Con entrenamiento militar y ya involucrada en los conflictos arraigados en lo profundo de Urzikstan, resultaste herida en Sakhra cuando al-Qatala sitió la embajada de Estados Unidos y te dejaron por muerto en algún lugar de las calles. La inteligencia estadounidense te había etiquetado como KIA. La gente de Urzikstan te acogió y curó tus heridas durante casi dos semanas antes de que estuvieras lo suficientemente bien como para operarte por tu cuenta.

Las cosas estaban turbias con la caída de la Embajada. Enviar noticias a los Estados Unidos sobre tu prueba de vida se volvió complicado. Te obligaron a seguir viviendo entre los ciudadanos de la República de Adel, pero lo que había sido un inconveniente se convirtió en un cambio en tu vida.

Al'umu, madre, la matriarca de la familia que te acogió, te había contado sobre las luchas de Urzikstan, las cosas que no aparecieron en los medios. Caminabas por esas calles después de que al-Qatala y los ejércitos de la OTAN las arrasaran, viendo la devastación que esa gente vivía a diario. Niños jugando a la pelota entre escombros. Los comerciantes se mantuvieron a flote incluso después de que la mitad de su frente fuera destrozada por los agujeros de bala.

La vida continuaba: ¿qué más podían hacer?

Conociste al comandante Karim en Sakhra. Ella fue la catalizadora de los Luchadores por la Libertad, su intrépida líder. Al'umu te presentó fervientemente, a pesar de que habías insistido en que no tenía sentido hacerle perder el tiempo al comandante. Sin embargo, a pesar de esa idea, Farah te agradeció por estar aquí para luchar, a pesar de que estabas en deuda con su gente cuando se puso el sol. Te uniste a sus Luchadores por la Libertad sin hacer preguntas. Enviaste mensajes a tu familia en casa pero permaneciste en Adel.

Es un caso extraño: un "forastero" cargando con las filas de los rebeldes de Urzikstan. No fuiste el único en hacerlo, pero te convertiste en el más notable considerando la proximidad que habías ganado con el Comandante.

Te convertiste en un activo militar pero de alguna manera te ganaste el favor del comandante. Mientras solicitas que Farah ponga los ojos en blanco y se burle, tu humor seco y tu rápido ingenio deben haber tomado medidas para encantarla. Tus afectos se hicieron más audaces, afectos que Farah mantuvo a distancia pero que nunca negó por completo. Continuaste tejiendo esa red, y ni siquiera la intrépida comandante de Urzikstan pudo liberarse de ella.

call of duty: modern warfare II; one shots Where stories live. Discover now