No Digas Nada.

320 53 256
                                    

– ¿Lo consiguieron? — pregunta al llegar a un semáforo

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

– ¿Lo consiguieron? — pregunta al llegar a un semáforo

– Si Doña, fue sencillo pero lo complicado va a ser conseguir una muestra del señor Navarrete

– Ya me adelante — le entrega una bolsa de evidencia con una botella de agua vacía — Soborne a la de limpieza, sé que estás pruebas se tardan al menos cinco días así que hoy mismo lleva esto para el laboratorio

– Si Doña


°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•


– Te tardaste — susurra cruzada de brazos

– Regina, dijimos que luego del almuerzo, trata de actuar normal o ella se va a dar cuenta y no querrá hablar con nosotras

– ¿Qué hay de malo con preguntarle ahora?

– Si todo sale mal, lo que es probable porque nos estaríamos metiendo en su vida, pelearemos envés de comer y yo quiero comer — camina al baño de servicio

– ¿Ya llego mi tía? — baja las escaleras — Muero de hambre

– Si, seguro fue a lavarse las manos, vamos a esperarla en la mesa

– ¡Tía! ¡Apurate!







Aunque Altagracia hizo un esfuerzo para que el almuerzo no fuera incómodo sin duda su hermana era incapaz de esconder sus ganas por saber más del enamoramiento de Isabela, al final el almuerzo quedo arruinado pues su sobrina no era estúpida, aunque ella pensó que se trataba de una noticia horrible o algo parecido pero eso no significa que no se enojara al saber el verdadero tema de conversación.







– ¡No puede ser! ¿Se lo dijiste a mi tía?

– Bueno si, ella es como tu segunda madre, debe estar enterada

– Escucha Isabela, apenas dejas de ser una niña, es normal que nos preocupemos, no planeamos prohibirte continuar con... Con lo que sea que quieras hacer — le hace una seña a Regina para que no dijera nada estúpido — Sólo queremos saber para apoyarte o hasta aconsejarte, aunque las dos... Somos pésimas en esa área

– ¿No se van a enojar entonces?

– Si nos lo ocultas si — advierte Regina

– Bien... Se los diré

– Es del colegio me supongo

– No, practicamos tenis juntas...

– ¡Es una chica!

– Altagracia recuerda lo que hablamos esta mañana

– Oh callate, no habrá que preocuparnos por un embarazo — abraza a Isa — Eres mi sobrina favorita, sólo quiero saber una cosa

°•°•Perfidia°•°•Where stories live. Discover now