SEX PARTNER || KOOKMIN

Capítulo 24.

JUNGKOOK:

Estoy tan feliz.

¿Cómo no estarlo?

Si la persona de quien me enamoré esta dispuesto a corresponderme. Me aceptó como alguien importante para él.

— Mmmm no muerdas tanto.— Se queja divertido por el ataque en sus pezones mientras lo hago mío.

Obviamente para sellar mi confesión y su aceptación teníamos que celebrarlo en la cama, es por eso que entre besos llegamos a la casita flotante que compartíamos, desnudandonos de inmediato. Para hacer que nuestros cuerpos se digan lo que faltaba decirnos. Las caricias, besos y choque de pieles hablaron por si solos, esto es más que antes y así será apartir de esa noche, de eso me encargo yo. No más sexo solo para satisfacernos por gusto y placer. Será amarnos de esta forma.

— Más rápido.— Suplica aferrándose a mi espalda.

Podía sentir sus caricias suaves y cariñosas en esa zona, causó que en mi aumentaran las ganas de seguir haciendolo mío.— Lo que ordenes mi amor.— Solté el apodo cariñoso sin dudarlo mucho.

— ¿Mi amor? — Él arquea una ceja así que detengo mis movimientos, preocupado de haberme adelantado al llamarlo así.

— ¿Te molesta?

Esperaba que no.

Y tal cual esperaba...— No, no me molesta. Dilo otra vez si quieres.

Y tras su respuesta me besó tomandome con fuerza de los cabellos.
Pese a esa distracción deliciosa me las arregle para seguir moviéndome dentro de él, aumentando el ritmo tal como pidió hace rato, logrando que gima sexy entre mis labios. Lo más maravilloso es que rodamos por la cama, sin dejar de abrazarnos, mientras nuestros cuerpos seguían unidos. Continue y continue haciéndolo mío como pude porque aferrados al otro pareciamos como dos imanes pegados.

Me sentí más libre al tocarlo. No había restricciones. Aproveche para marcar todo su cuerpo con besos y mordidas, él se dejaba hacer perdido en el placer, dejándose llevar por lo que teníamos en ese momento. Tan duradero fue la primera ronda a diferencia de otras secciones de sexo. Nos sentimos agusto y con ganas de seguir otra hora más que quizás fue lo que duró la primera ronda entre nosotros. No lo sé con exactitud.

— ¡Qué increíble! — Exclama descansando la cabeza sobre mi pecho.

Y yo embobado con una sonrisa de oreja de oreja por lo sucedido le acaricio suavemente la espalda desnuda de arriba a abajo.

— ¿Continuamos o descansamos un poco más? — Le pregunto.

Él deja besos en mi pecho y causa que grite internamente de emoción.— Yo quiero continuar pero primero voy a ordenarle algo personalmente a uno de los empleados de esta playa.

— ¿Iras así? — Lo miro confundido cuando se levanta de la cama.

— Obvio que no mocoso tontito. Me pondré ropa interior y una bata, además, no tardaré mucho. Solo serán unos minutos.

Y eso hace. Se coloca la bata y ropa interior, saliendo de la casita flotante no sin antes besar mis labios. Aquello me emocionó aún más, la dicha y alegría no cabia en mi pecho... ¿Cómo todo me está saliendo tan bien?

Aun no puedo creerlo.

Menos que me haya atrevido a confesarle lo que siento. Mi plan era primero conquistarlo y enamorarlo después confesar lo que siento para tener seguridad pero cuando sentí que me estaba mandando a la friendzone, tomé la decisión de ser directo y Jimin sepa mis intenciones con él. No esperaba una respuesta positiva de su parte pero fue tan increible porque todo salió a mi favor.