SEX PARTNER || KOOKMIN

Capítulo 33.

JUNGKOOK:

Quiero reírme. Quiero reírme. Quiero reírme. Quiero reírme. Quiero reírme.

Pero me aguanto.

Esto es tan gracioso que hasta pena me da.

Seokjin no sabe que hacer para incomodarme en la casa. Sus intentos que por cierto son malisimos no me afectan en nada... Horribles gestos, darme la contra y andar como vieja chismosa mirando todo el tiempo lo que hago. Yo solo continuo con mi día a día. Amando a Jimin e ignorandole cuando esta cerca. Eso le jode más. Tanto que en cualquier momento se rendirá y explotará del coraje que tiene acumulado por nuestra relación. Espero ese momento con ansias para que Jimin lo escuche de sus propios labios.

Como al que llama amigo es un egoísta y envidioso.

Aunque antes de rendirse con que soy alguien definitivo en la vida de Jimin quiso apuñalarme con otra estaca. La verdad eso sí me sorprendió... ¿Qué le pasa por la cabeza? ¿De verdad no le importa usar a su esposo?

Eso es lo que pienso cuando Namjoon sorprendió a Jimin con un ramo de girasoles. Según él por agradecimiento por todo lo que hizo por él como pagar los gastos de salud de su familiar... ¿Es en serio? Semanas desde que regresaron y recién se le ocurre hacer algo así, por eso yo siento que Seokjin lo alentó para joderme. Jimin estuvo complacido solo porque los girasoles son sus favoritas, se los aceptó poniéndolo en un florero y yo disimule un poco mi molestia frente a él hasta el día siguiente. Tratando de seguir con mi plan de hacer caso omiso porque Seokjin ganaría.

— Jungkook.— Llama cuando estamos a solas en nuestra habitación.

Me mantengo de brazos cruzados y contando hasta diez para poder controlarme de hacerle una escena de celos.

— ¿Qué quieres cariño?

Él se acerca para abrazarme.— No me gusta que estes molesto. Dime... ¿Te sientes inseguro de nuestra relación por el ramo que ayer me regaló Namjoon?

Inseguro.

La verdad ya no.

Antes sentía que Namjoon era un rival amoroso difícil de superar pero ahora todo es tan distinto. Jimin casi ni lo mira. Ademas, me siento mejor que él.

Lo soy en realidad.

Soy mejor que Namjoon.

Pero si el que fue la primera ilusión de tu pareja le regala un ramo de girasoles con mañas por detrás y confabulado con su esposo que no disimula para nada lo egoísta que es y la envidia que siente, ¿No me va a molestar?
Claro que si. Y también causa algo de celos porque alguien más alegró a tu pareja con un detalle como un ramo de girasoles que son sus favoritas.

— Si te sientes inseguro dime que hacer para remediarlo. Haré lo que tu quieras.— Insiste Jimin y me derrito por eso.

Tomo su rostro entre mis manos y acerco el mío para besarlo.

— Solo sigue demostrandome lo importante que soy para ti.— Eso es todo lo que le pido a Jimin.

— Claro que si.— Y nos besamos.

Con lentitud y calma vivimos ese momento. Otro más gracias a que no deje ganar a Seokjin. Pensando en él, tengo una curiosidad.

— Mi amor...— Hago que me mire a los ojos.— ¿Tu me creerías sin dudar si te contara algo malo de ciertas personas a quienes tu les tienes confíanza durante años?