Manada

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La pelea entre ambos lobos continuaba, solo eran dos parejas que se enfrentaban a consta de la muerte. Ren estaba siendo derrotada por la castaña, sus brazos y espalda tenían heridas profundas y su sangre goteaba de la boca de Rocio.

Ren se arrastraba débilmente por el suelo, Rocio la rodeaba entre gruñidos, como una señal de advertencia. La castaña pasó su lengua por sus labios, probando la sangre de la licántropo, rugió con furia y se lanzó a ella.

Vicky se encontraba en el suelo, estaba siendo rodeada igualmente por Félix, cuando levantó la mirada de inmediato al oír el chillido de su pareja, vió con angustia a Ren, siendo sujetada por el cuello en el gran hocico del lobo negro.

Ante sus ojos, Rocio mordió con furia, destrozando el cuello de Ren, quien solo pudo batallar por poco tiempo, antes de que su cabeza y manos colgaran, quedando sin rastro de vida.

Los ojos de Vicky se humedecieron, en ellos se reflejaba a su pareja, la mujer que había amado toda su vida.

Félix no dejaba de rodearla, estaba atento a cualquier movimiento. El pelinegro retrocedió ante el rugido repentino de Vicky, estaba furiosa, dolida, se puso de pie y en un acto de descontrol, se lanzó a Félix y con sus garras comenzó a cortar su piel en cada golpe.

Félix trataba de defenderse pero Vicky sorpresivamente estaba siendo más fuerte, Rocio saltó a su espalda pero fué lanzada con fuerza sobre la fogata, la castaña terminó rodando hasta chocar contra un árbol.

El pelinegro soltó un grito desgarrador cuando su brazo fué partido a la mitad, Vicky lo tomó del lomo y lo estrelló una y otra vez contra el suelo, lo tomó con ambas manos y furiosa, mordió su espalda, arrancando parte de su piel, rugiendo con la sangre manchada en su rostro.

Estaba a punto de romper su cuello, cuando una gran cantidad de balas fueron destrozando la piel de su espalda, eso ayudó a que soltara por un instante a Félix.

Roier entró conduciendo el auto, la velocidad era difícil de controlar, pero con Sabi disparando finalmente su arma favorita, ayudaba a lastimar a esa bestia.

Vicky rugió en su dirección, estando más furiosa.

_¡CÁLLATE! - gritó Sabi con enfado, disparando directo en garganta mientras rugía.

Roier giraba en círculos, tuvo que hacer una maniobra rápida cuando estuvo a punto de atropellar a Rocio, ella finalmente se hizo a un lado.

Vicky sacudió la cabeza por las heridas en su boca, volvió a mirar el auto poniéndose en cuatro patas, corrió a él y de un solo salto, se sujetó del techo con sus garras.

Roier esquivaba la mano que Vicky metía por la ventana, intentaba sujetarla. Sabi gritó del pánico cuando Vicky perforó el techo de un solo golpe, la pelimarron metió su mano y chilló cuando Sabi aprovechó para clavar una cuchilla en su muñeca.

_¡Frena! ¡Frena! - gritó Sabi, siendo ella misma quien piso el freno. Vicky salió despedida cuando el auto se detuvo en seco, Roier volvió a acelerar y esta vez golpeó a la pelimarron cuando esta apenas se volvía a poner de pie, logrando aplastarla de la cadera contra uno de los tantos árboles - ¡Jodete! - gritó Sabi, y tomando su metralleta, lo sujetó con fuerza y comenzó a disparar de frente, todas las balas se incrustaban en la carne del licántropo.

Rocio se acercó a Rivers, la olfateó cerca de su rostro y lamió su mejilla, Rivers estaba viva.

Los disparos pararon y el cuerpo de Vicky quedó tendido en el capó del auto. La respiración de Sabi era agitada, nunca en su vida pensó vivir una experiencia así.

_¿Es...todo? - preguntó, nerviosa. Roier tragó en seco, estaba igual de nervioso, asintió ante su pregunta y girando a ver a Sabi, se acercó a ella y la atrajo en abrazo - cuidado - pidió Sabi en un quejido - mi pierna.

Una Loba Como Mascota || Factor R Where stories live. Discover now