Observo a mi derecha y me encuentro con su mirada de hielo. Su asiento dispuesto a mas de diez metros del mio, pero sin embargo, no parece ser una razón para impedir nuestro contacto visual.
Durante aquellos cinco segundos de duración, él ni siquiera parpadea, solo mantiene sus verdes ojos sobre los mios, sin ninguna expresión o sentimiento en concreto.
Entonces Louis aprieta mi mano y corta nuestro vinculo.
-Este es el momento en que...-todos los alumnos se paran casi al mismo tiempo y lanzan sus gorros azules al cielo soleado de este día.
-¡Estamos graduadas!-Lena aparece a mi lado y me da un abrazo entre saltitos de emoción-. No puedo creer que no mas tareas ni educación física obligatoria.
-Lo se, ¡es excitante!-no puedo quitarme la sonrisa de la cara.
Antes de que pueda acercarme a hablar con Zeeke, que charla animadamente con Peter Green a unos cuantos metros de nosotras, alguien me toma por el brazo, empujándome fuera del grupo de alumnos.
-Necesitaba decirte algo antes de que todo esto acabe-los ojos de Louis brillan mas que nunca. Puedo ver su camiseta violeta de los Lakers por debajo de la túnica azul.
-¿Que es lo que tienes que...?-comienzo a decir, pero antes de que pueda terminar, él me toma por los brazos y me da un cálido beso en los labios.
Lo primero que siento es calor, además de una extraña sensación de inquietud en las manos. Estas últimas van a parar a lo alto de su pecho.
Nos separamos y me encuentro sonriendo al mismo tiempo en que el lo hace. Hace mas de dos meses que no sentía la sensación de besar a alguien en los labios.
-¿Quieres ser mi novia?
Ring.
El sonido del timbre me obliga a dejar la masa de tarta sobre la mesa para abrir la puerta. Son mas de las ocho de la noche, ¿quien podrá ser?
Observo por el ojillo de la puerta: una cara desconocida se agranda por el lente.
-Hola-digo algo confundida, tras abrir la puerta. Frente a mi se encuentra una chica de contextura pequeña y de baja estatura, con la piel oscura y el pelo y ojos a juego. Jamás la había visto en mi vida.
-¡Hola! me llamo Kendall y soy una de tus vecinas. Solo quería darles una cálida bienvenida a Nortway, pues en estos días he estado muy ocupada con el trabajo y no he tenido el tiempo suficiente para presentarme correctamente. Espero que les guste el chocolate, porque preparé un delicioso pastel de chocolate con naranja, ¿vives con alguien mas?
-De hecho, si-Louis aparece a mi lado tras haber pasado toda la tarde echado sobre el sofá. Huele a Cheetos y tiene toda la camisa del trabajo arrugada-. Soy Louis Tomlinson y estaré encantado de aceptar ese pastel.
Rodeo los ojos.
Kendall extiende el mismo y Louis lo coge, antes de volver al interior de la casa.
-Bueno, ya viste a Louis,mi conyuge y yo soy Skylar...solo somos nosotros dos. En fin, muchas gracias por el obsequio, me siento escasa por no haber hecho lo mismo.
-¡Oh! eso no es un problema, de verdad.
-Enserio que me encantaría invitarte a pasar pero...-le echo un vistazo al interior: los muebles están polvorientos y la sala muy desacomodada, a causa del hombre que vive conmigo-. De verdad que no quieres entrar.
-Tampoco te preocupes por eso, solo vine a dejar la torta y...espero que algún día te pases a charlar-ya está alejándose cuando dice eso-. ¡Oh! lo olvidaba-y se acerca de nuevo para susurrar:- cuida tus plantas, porque el perro de los Domson es un desastre y, ¡ah! ¿hablar en la calle? olvidate de ello, porque la señora Fivens de la casa de la esquina lo escucha todo, a pesar de sus años.
