Don't you wanna stay here a little while?

3.5K 268 28
                                    

Este tiempo de vacaciones lo he pasado más con Joe que en casa.

No voy a mentir, no todo ha sido tan fácil como parece. Tuve que enfrentar a Marie nuevamente e incluso el caso de Hudson por ser víctima solo para dar por terminada ambas circunstancias a las que me obligaron. Ninguna de las dos fueron fáciles pero terminaron para mí.

Al final de cuentas Joe se decidió por un departamento que estábamos acondicionando a su antojo, eso sí, siempre pedía mi opinión porque según él era importante.

—No pintaste bien eso de aquel lado —dije admirando mientras pintaba su pared.

—¿Dónde? —preguntó esta vez mirándome.

—Ahí en la esquina.

—Yo veo que está bien.

—No, ahí.

En una sacudida de mi brocha y apuntando, pequeñas gotas fueron a la parte frontal de la playera de Joe además de su rostro.

Tapé mi boca con una mano para reprimir mi risa, algo que a Joe, no le pareció gracioso.

—¿Lo siento? —me acerqué cautelosamente a él poniendo mi más grande sonrisa.

—No creo que yo necesite pintura

—Noup —bromeé pasando la brocha rápidamente por el puente de su nariz.

—Kim... —dijo en tono de advertencia —concéntrate en pintar tu pared.

—Blablabla, sí señor. —Dije de mala gana.

Una brillante idea pasó por mi mente y con la pintura en color marrón obscuro que tenía reservada, tomé una brocha pequeña que tenía a la mano y fui hasta el extremo de la pared y dibuje un diminuto corazón, de lejos podría ser un confundido con un punto al azar, de esa manera, firme por dentro el corazón.

—¿Qué hiciste Kim?

Joe últimamente había perdido un poco el humor, tenía la presión sobre él en la nueva Universidad, estar lejos de casa, haber conseguido su propio departamento. Todo había cambiado para él de una manera abrupta.

—Cada que veas esa pared te vas a acordar de mí —amenacé y le quité su brocha —Ahora...lárgate al sofá —ordené como si estuviera molesta.

No lo estaba pero aprendí que a veces necesito hablar como lo hace él en caso de que esté molesto.

Lo escuché soltar un suspiro y lo seguí con la mirada hasta que prácticamente se lanzó en él. No estaba bien, no cuando incluso echaba su cabeza hacia atrás y se quedaba pensativo. Dejé mi brocha y caminé colocándome detrás del sofá, pasando mis manos de sus hombros hasta su pecho, di un beso en su mejilla.

—Solo tranquilízate —dije con voz baja masajeando sus hombros —debería relajarte y divertirte pintar.

—Siento haberte hablado así Kim —aún con su cabeza hacia atrás me mira arrepentido.

Niego y esbozo una sonrisa al acercarme a sus labios.

No sé como hizo para estirarse y sin dejar de besarme me tomó por las costillas y me alzó. Grité como una niña ya que creí que caería feo, estaba esperando un feo impacto de mi cuerpo pero no fue así. Terminé a su lado con mis piernas en su regazo y era él quien se reía ahora.

—Creí que iba a matarme —acompañé sus risas.

—Jamás haría algo que te haría daño Kim.

Con una mirada divertida se colocó sobre mí en el sofá. Enredé mis manos en su cabello y mis piernas alrededor de sus caderas atrayéndolo hacia a mí.

She is Mine ©. (Parte 2 She is Special-TERMINADA).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora