KEEP YOURSELF ALIVE #2: Let Me In Your Heart ♕

Capítulo Especial Nº 2

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¡Querido diario perdido en el tiempo!:

Siento que hasta voy a tener que presentarme otra vez de la cantidad de tiempo que ha pasado. ¡Cinco años enteros! Demasiadas historias que contarte. No me queda más remedio que hacer acopio de memoria y contarte todo lo que se me ocurra.

Freddie y yo nos hemos mudado a una casita encantadora de dos plantas. Nos hemos pasado toda la mañana desempaquetando y sacando el equipaje. Así es como te he encontrado, diario. Estoy muy emocionada con la mudanza, este sitio me encanta. Freddie también parece contento. Tiene mil ideas de decoración, y está deseando llenar la casa de todas las cosas lujosas y caras que se ha pasado comprando todo este tiempo.

Otra buena noticia es que Curtis está trabajando como segundo chef en un restaurante de renombre de París. ¡París! Estoy muy orgullosa. Cuando me llamó para contármelo le dije que iríamos a visitarlo, pero de eso hace ya nueve meses. Esta vez por fin vamos a ir a visitarle, la semana que viene, después del cumpleaños de Freddie. Me hace mucha ilusión, hace bastante tiempo que no nos vemos. También quiero ver a Lily. Me contó que ha engordado un poco ahora que se está haciendo vieja. Esa gatita es una ternura, me mandó una carta con fotos suyas y da lo mismo que haya engordado. Sigue siendo una pequeña bola de pelo adorable.

A Evelyne le está yendo bien también. Le han dado un papel principal en el musical Cats. Ella hace de Bombalurina. Tiene que cantar y bailar, y está más que encantada. Además está tanteando a un amigo director para conseguir que le den un papel en una película. Está a punto de cumplir su sueño. Qué ganas de verla en la televisión y en el cine, ¡va a ser brillante!

Queen sigue en su racha. El año pasado estuvieron trabajando muy duro. Sacaron dos álbumes: The Game y la banda sonora de Flash Gordon. ¡Ese Flash es afortunado! Ahora están descansando y tomándose un respiro. Además, en cuatro días es el cumpleaños de Freddie, como ya he comentado antes. Vamos a reunirnos todos. Será como en los viejos tiempos, seguro que lo pasamos genial juntos. Todos tenemos muchas ganas.

Por mi parte, ¡estoy en plena construcción del segundo tomo de "Little Freddie Goes To School"! Publiqué el primero a principios de año, y está teniendo buena acogida entre el joven público. No dejo de cavilar con nuevas historias para el pequeño Freddie. El Freddie grande está muy conforme con que haya usado su nombre, aunque se sorprendió bastante cuando se lo dije la primera vez. Lo único malo de tener trabajo que hacer y estar un poco estresada con ello, es que me he enganchado al tabaco. Caí ante mi más odiado enemigo. Siempre estoy intentando dejarlo, pero nunca lo consigo. Ahora entiendo porque todo el mundo fuma, ¡esta diabólica adicción es imposible! He cambiado en muchos aspectos, eso seguro. He crecido, evidentemente. Y lamentablemente he adquirido un modo de vida poco sano. No le voy a echar la culpa a Freddie, porque he decidido imitar sus dichosas malas acciones yo solita.

Creo que eso es todo. Seguramente se me han pasado mil cosas, pero ahora mismo no se me vienen a la cabeza. ¡Espero que esta no sea la última vez que te encuentro por ahí! Volveré con nuevas noticias, tal vez me aficione otra vez a esto de escribir en un diario. Aunque me siento un poco azorada teniendo tras estas páginas todos esos recuerdos. Eres un arma poderosa. ¿Y si compro otro cuaderno? No, eso sería más triste aún. ¡Tantas páginas en blanco me recordarían a los tiempos de bloqueo de escritora con el pequeño Freddie!

En fin, me despido ya. Freddie me llama para ayudarle con unas cajas sospechosas. Procuraré regresar muy pronto. ¡Un saludo para la Amanda de 25 años que comenzó este diario! Y para quien quiera que termine leyendo mis aventuras. Quién sabe si ya soy muy vieja y he publicado mi autobiografía. Aunque me daría vergüenza, pero supongo que hasta puede resultar divertido. Y si ese no es el caso... no debes leer el diario de los demás, ¡está mal y tienes que pedir permiso antes! Pero, qué diablos, no quiero saber si lo estás leyendo o no. Ojos que no ven, ¡pasado vergonzoso y movidito que no ha sido descubierto!

Eso es todo, me voy. ¡Hasta pronto, querido diario!

Amanda Malvolia Baxter