¿Podemos enamorarnos?

Capítulo 29.- Baile.

Hiccup se encontraba sentado en una de las sillas del comedor de la casa de Astrid, el Sr. Hofferson y su esposa lo veían, nunca un chico les había pedido permiso para salir con Astrid o al menos Lance, no lo había hecho. Él empezaba a sentir el nerviosismo y creía que ya no era tan buena idea, "Hacer lo correcto", como Tooth le había dicho. El Sr. Hofferson lo miraba serio, mientras que su esposa lo veía un poco inconforme, Hiccup sabía que no le caía bien a la tía de Astrid, pero no esperaba que se lo demostrara tan abiertamente, esperaba un odio, mas secreto, de su parte.

- Hiccup... no sé, ni siquiera como reaccionar - decía el Sr. Hofferson un poco nervioso.

- Astrid no está para juegos - le decía la Sra. Hofferson seria y petulante - si solo quieres jugar, será mejor que te busques a otra.

- Créame Sra. Hofferson, si yo deseara solo jugar, no vendría a la casa de la chica que me gusta, a pedirle permiso a sus padres de salir con ella - respondía Hiccup serio y con educación - es por eso que he venido, no quiero jugar, la quiero de verdad y no solo por diversión.

Hiccup callo, por un momento pensó que tal vez era un error, tal vez ellos se lo tomarían a mal. El Sr. Hofferson miro a Hiccup, le recordó a Astrid, el mismo comportamiento, soltó una ricilla, miro a su esposa, ella no parecía convencida.

- Si tú crees que....

- Te doy permiso Hiccup - interrumpía el Sr. Hofferson a su esposa, el sonrió, mientras Hiccup y su esposa lo mirabas sorprendidos - hazla feliz muchacho.

Hiccup sonrió ante aquel gesto, no había sido tan difícil. Johnny llego a su casa y saludo a Hiccup sonriendo, se puso a platicar un momento con él, mientras ambos salían. Él observo el reloj de su móvil, se despidió de los Sres. Hofferson. El Sr. Hofferson, junto con Johnny lo acompañaron a la salida de la casa, los tres vieron que Astrid regresaba con varias bolsas y una caja, mientras ella los miraba sorprendida.

- Hiccup... - decía ella algo extrañada - ¿Qué haces aquí?

- Hola Astrid - la saludaba él - bueno yo...

- Me trajo una papelería de la compañía de su padre, cielo - contestaba su tío sonriendo - y se quedo charlando un poco con nosotros.

- Si es cierto - decía Hiccup sonriendo - me tengo que ir, nos vemos mañana y gracias Sr. Hofferson.

Hiccup se retiro, se había tardado más de la cuenta. Astrid observo cómo se iba, mientras su tío y Johnny le preguntaban como era su vestido y ella solo decía que era secreto. Entraron a la casa aun riendo, Astrid noto cierto ambiente hostil, los tres dejaron de reír, Astrid y Johnny subieron a sus cuartos, ella no quería ser interrogada aun y menos por su tía que estaba molesta.

Ya era viernes por la tarde, dentro de una cuantas horas seria el baile, las clases de ese día habían pasado rápido. Parte de la tarde del miércoles y el jueves entero, la tía de Astrid no le había dirigido la palabra para nada, ni a ella, ni a Johnny, ambos chicos no se preocupaban por eso, ambos se decían, "Ya se le bajara la rata", o al menos eso esperaba,. Por otro lado su tío los apoyaba a ambos y conversaba bastante con ellos, pero su mujer aun seguía molesta.

Astrid esperaba junto con Mavis y Violetta a las demás chicas, estaban en la entrada del colegio, ahí había quedado en verse, Mérida las llevaría a todas a casa, no debían de perder tiempo. Los chicos jugaban con el robot de Hiccup, lo encontraban muy divertido, mientras que ellas solo reían, todos conversaban y felicitaban a Hiccup, Guy y Wilbur, por haber ganado el primer lugar con ese robot, ya que era un gran proyecto. Johnny jugaba con el robot al igual que Wilbur, les parecía realmente increíble.