¿Podemos enamorarnos?

Capítulo 31.- Vámonos de campamento.

Las cosas no habían salido como esperaban, los populares y los rebeldes se peleaban peor que nunca, incluso habían empezado a jugarse brumas y hacerse burlas entre ellos. Hiccup y Astrid observaban como se comportaban sus amigos en los pasillos, todo se estaba saliendo de control. Aun no era hora de entrar a clases, habían decidido ir a las canchas, no querían estar en el edificio, después de todo, no sabían cómo se comportarían sus amigos.

- ¿Qué haremos Hiccup? - preguntaba ella seria - mañana será viernes y aun no se tranquilizan, tenemos que hacer algo.

- No tengo idea de que podamos hacer - respondía él aun más serio.

Astrid lo observo, no esperaba esa respuesta, por lo general Hiccup tenía un plan siempre, pero ahora no.

- No esperaba esa respuesta - soltaba ella con preocupación.

- Si bueno, perdón - respondía cruzado de brazos - no soy perfecto, pero, se quién podrá ayudarnos.

Ambos chicos entraron al edificio, aun era temprano y se notaba la escases de alumnos. Hiccup se detuvo en una puerta y toco un par de veces, le respondieron que pasara. Ambos chicos entraron, vieron a Tooth que se encontraba acomodando algunas medicinas en un gabinete y ella solo les sonreía.

- Tooth, necesitamos un consejo - decía Hiccup pasándole algunas medicinas.

- En primera, buenos días - respondía ella sonriendo - y en segunda, no doy terapia de pareja, no soy psicóloga, solo soy enfermera.

- Y aun así nos das consejos - le contestaba él - Tooth, ¿Por qué nos haces esto? - le preguntaban desesperado - sabes que nos ayudara, Astrid lo sabe, tú lo sabes y yo lo sé.

- Me gusta verte sufrir - decía ella sonriendo, mientras le guiñaba un ojo y le sonreía a Astrid que solo se reía - bien, soy toda oídos, ¿Qué pasa?

Ambos chicos empezaron a contarle a ella lo que había pasado un día anterior, ella ponía toda la atención, sabia cual era el problema, y comprendía que a esa edad todos los chicos fueran tontos. Tooth solo suspiraba y los observaba a ambos, mientras los escuchaba, no lograba entender, como sus amigos prefirieran el estatus, que la relación de ellos.

- Si que pasó mucho - decía ella sonriendo - porque no les dan lo que quieren.

- Te refieres a... - le comentaba Astrid mientras ella solo asentía.

- Puede que funcione - decía Hiccup, mientras sacaba una hoja de su cuaderno y se ponía a escribir.

Astrid lo observo, vio como escribía, él sonrió a la hoja y se la mostro a ella, mientras solo la veía incrédula.

- Gracias Tooth - decía Hiccup sonriendo, mientras se levantaba de su asiento al igual que Astrid.

- Por nada - les decía ella sonriendo - suerte.

Ambos chicos se retiraron, a campana sonó y decidieron ir a su primera clase.

Ya a la hora del almuerzo, los populares y rebeldes se encontraban molestos, se empezaban a pelear entre ello, se sentían traicionados, Astrid e Hiccup les habían mentido alrededor de un mes. Ambos chicos se miraron y asintieron, si era lo que ellos querían, lo harían, con tal de que no siguieran con lo mismo. Vieron como sus amigos se gritaban unos a otros, Hiccup logro observar como Guy se escondía debajo de la mesa, al parecer no quería participar en esa pelea.

- ¡Hey! - gritaba Hiccup, pero no le ponían atención, él puso dos dedos en sus labios y silbo con fuerza.

Los chicos se callaron, Astrid lo observo sorprendida, mientras el se cruzaba de brazos.