Capítulo 9.- DunBroch y Haddock.

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Era el primer día de clases de Hiccup en el colegio de CION, el realmente esperaba ver a todos sus amigos e incluso hacer nuevos. Hiccup usaba unas gafas grandes y era un poco bajo de estatura, pero eso a él no le importaba, ya que él tenía en cerebro lo que a ciertos chicos le sobraba en músculos.

Hiccup vio que ninguno de sus amigos se encontraba en su misma clase, pero hizo un amigo era un chico que venía de New York, el chico tenía el cabello blanco, su tés era pálida y sus ojos de color azul fuerte, él era Jackson Frost, pero Hiccup le podía decir Jack. En su clase también se encontraba una chica de cabello rojizo y rizado, ella era un poco ruda con los chicos, era Mérida DunBroch. Mérida e Hiccup se hicieron buenos amigos, en ocasiones Mérida ayudaba a Hiccup en matemáticas y él la ayudaba en ciencias.

Hiccup se había hecho amigo de varios chicos y se metía en problemas seguido con ellos y los llamaban los rebeldes, mientras que Mérida tenía varias amigas y se hacían populares con el tiempo, pero a ellos eso no les importaba, lo único que importaba era su amistad.

Hiccup se dirigía junto a Mérida al club de arquería, platicaban de cosas que hacían sus amigos y se reían, hasta que una chica se tropezó con Hiccup y estos cayeron al suelo.

- Disculpa - decía la chica con la que había topado - fue mi culpa.

- No te preocupes - le contestaba el mientras recogía sus anteojos - fue mi error por no ver en donde caminaba.

- Astrid te dije que debes de tener cuidado - decía Mérida viendo a su amiga, mientras Hiccup - eres muy distraída.

- Perdón es que llego tarde a la práctica de porristas - le contestaba la chica avergonzada - nos vemos, y de nuevo lo siento.

La chica salió corriendo con sus pompones e Hiccup se le quedo viendo, mientras Mérida solo miraba como Hiccup se le quedaba viendo embobado, ambos se fueron a la práctica de arquería y los días pasaron en el CION.

Los días se hicieron semanas, las semanas se hicieron meses y los meses se hicieron un año, Hiccup había cambiado bastante en el verano, ya no usaba sus gafas, el cabello lo tenía un poco largo e incluso había crecido lo suficiente para ser de una estatura alta y su cuerpo tenia músculos marcados debido al ejercicio, pero su actitud era la misma. Mérida había crecido un poco y su cabello era un poco más largo, pero la amistad de Hiccup y ella seguía intacta.

Hiccup ahora era vecino de casillero de Astrid, la chica ahora tenía un novio y se veía feliz con él. Hiccup veía a Astrid y Mérida lo notaba, en ocasiones sentía celos de ella, pero después se le pasaban ya que Hiccup jamás había hablado con ella.

La mayoría de las chicas del colegio ya se le habían declarado a Hiccup y el las rechazaba, el no salía con ninguna de ellas y eso que las mayoría era muy lindas. Mérida sentía que entre más tiempo pasaba, más le gustaba Hiccup y se le declararía, ya que sentía que a ella no la rechazaría.

Mérida tomo la decisión y sito a Hiccup en el parque cerca de su casa, a las 5p.m. ese sería el lugar perfecto para declarársele, él y ella serian novios. Hiccup llego a la hora acordada y ahí estaba Mérida esperándolo.

- Hola Mérida - decía Hiccup un poco serio - ¿Qué es lo que sucede?

- Hola Hiccup - le contestaba Mérida algo nerviosa - no pasa nada, es solo que te quería ver.

- Mmm ok - le contestaba él serio.

- Hiccup - le decía Mérida un poco seria - ¿te gustaría ser mi novio?

Hiccup se había quedado sorprendido ante aquella frase, se lo pudo imaginar de cualquier chica, pero jamás de ella. Lo peor de todo era que tenía que darle una contestación, y se la tenía que dar ya.

- Te lo agradezco - le decía él un poco serio, mientras ella lo miraba con esperanza - de verdad te lo agradezco, pero, yo no estoy enamorado de ti, lo siento.

- No hay problema - le contestaba ella triste y seria - ¿tú estás enamorado de Astrid verdad? Es por eso que no saldrás conmigo, ¿cierto?

- No, no estoy enamorado de Astrid - decía Hiccup sonriendo - no saldré contigo, porque no saldré con alguien a quien no amo, eso seria jugar con el corazón de la persona.

Mérida e Hiccup se quedaron en silencio un buen rato, si voltearse a ver a la cara, después de un gran silencio incomodo Mérida hablo.

- Gracias Hiccup - decía ella con lágrimas en los ojos - por rechazarme de una manera linda.

Hiccup apenas le diría algo, pero ella salió corriendo camino a su casa, el decidio no seguirla ya que eso podría alterarla. Toda la tarde y gran parte de la noche Mérida lloro, ya que le habían roto el corazón y de la manera más linda que podía haber.

Los días pasaron y ellos se distanciaron, se distanciaron a tal punto que no se podían ver ni a la cara, cada vez que se topaban era solo para molestarse el uno al otro y hacerse la vida imposible.

Mérida recordaba lo que había sucedido con Hiccup, se dio cuenta de que la reacción que había tenido hacia Astrid, con ella jamás la tuvo y eso realmente le dolía, ya que sabía que en su interior ella aun añoraba aquellos días en los que ellos dos eran muy buenos amigos.

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hola aqui les dejo otro capitulo mas, ahora si sabemos el porque Mérida e Hiccup se llevan tan mal.

¿Hiccup se sentira culpable acaso?

¿Mérida aun estara enamorada de el?

bueno pues no lo se,,,, xD ustedes que opinan, espero y les halla gustado el capitulo subiere otro mañana, les deseo un feliz año nuevo, espero y se la pasen genial, oh cierto espero y que lean mi nueva historia ¿Un contrato por amor? (Hiccstrid en la vida real) y me comenten que es lo que les parecio.

gracias por leer y feliz año nuevo c':

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