Capítulo 12.- Una tarde loca de diversión.

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Hiccup caminaba de regreso a su casa, había ido a casa de Kristoff por un CD de una de sus bandas favoritas, ''The Killers'' el álbum era ''Direct Hits'', era uno de sus álbumes favoritos, una de sus canciones favoritas de ese álbum era ''Just Another Girl''. Hiccup pasaba por un parque cerca de casa de Kristoff, veía a las parejas demostrar su amor, el solo sonreía, pero se sentía incómodo. Logro notar que a lo lejos se encontraba una chica, estaba sentada bajo un árbol y leía un libro con el título ''Orgullo y Prejuicio'' de Jane Austen, esa chica era Astrid. Hiccup se acercó a ella y ella solo despego la mirada de su libro, para poder ver quien estaba parado junto a ella.

- Hola Astrid - decía Hiccup sonriendo - ¿Qué es lo que haces aquí, sola en el parque?

- Hola, Hiccup - lo saludaba Astrid feliz - pues, leo este libro, es uno de mis favoritos y ¿tu?

- Vengo de casa de Kristoff, fui por mi CD favorito - le respondía él - ¿vienes seguido a este parque Astrid?

- No, solo cuando mi tía se pone a limpiar como enferma - le contestaba ella - hoy es sábado y según ella, los sábados son de limpieza. Por lo general me voy con alguna de las chicas, pero hoy todas salieron.

- Y ¿Por qué no le llamaste a Mavis? - le preguntaba Hiccup - o a Violeta.

- No quiero aprovecharme de su amabilidad - le respondía ella - y Violeta, bueno ella y yo aún no nos conocemos bien. Creo que me quedare aquí hasta más allá de las 7 de la tarde, que sale mi tío del trabajo.

Hiccup se quedó pensando un buen rato, miro su Smartphone y vio que eran las 12 del mediodía, Astrid no se podía quedar tanto tiempo en el parque. Fue ahí en donde se le ocurrió una gran idea.

- ¿Qué tal si vienes a mi casa? - le decía Hiccup mirándola, mientras ella lo veía sorprendida - mi padre no estará, pero mi madre si, ahí te puedes quedar hasta que tu tío salga, claro, ¿si quieres?

- ¿pero no importunare a tu madre con mi visita? - le preguntaba Astrid pensativa.

- Claro que no - le respondía él sonriendo - a ella no le importara.

Astrid se fue con Hiccup, caminaron un par de calles y llegaron a una residencia muy elegante, el terreno estaba cercado con grandes bardas de piedra color gris, había un pequeño telefonillo, cerca de una gran reja alta de color negro, Hiccup se acercó y hablo picando un botón.

- Phil, soy yo - decía Hiccup mientras presionaba el botón del telefonillo - abre la reja por favor.

La reja se abrió de marera automática, Astrid e Hiccup entraron y el saludo a Phil, que se encontraba con otros guardias de seguridad en una caseta, Astrid ya no se sentía tan segura de haber aceptado la invitación de Hiccup. Se podía ver una gran casa a la colina era un gran terreno y todo estaba cubierto de césped, a excepción del camino por el que iban. Caminaron unos minutos y llegaron a la entrada, era un porche grande, tenía dos puertas de madera color caoba, la casa era enorme y de color blanco. Hiccup saludo a los guardias y abrió la puerta, dejo entrar a Astrid y después él.

La casa era hermosa por fuera, pero por dentro era aún más bella, era una casa muy moderna y había varias personas al servicio.

- Hola Modelan - saludaba Hiccup a una señora grande de edad, se veía que tenía unos 45 años - ella es mi amiga Astrid Hofferson, Astrid ella es Modelan, es la ama de llaves.

- Buenas tardes, joven Hiccup - lo saludaba ella sonriendo - es un gusto conocerla señorita Hofferson.

- El gusto es mío - le decía Astrid sonriendo.

¿Podemos enamorarnos? Where stories live. Discover now