Capítulo 20

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Capítulo 20

Justin soltó un largo suspiro de fastidio y se reacomodó en el asiento. Observó a su alrededor. La gente estaba callada y atenta a la película que se estaba proyectando en la gran pantalla. Ya llevaba una hora sentado en ese incomodo asiento y aburrido. ¡Una mal.dita hora aguantándose como las chicas suspiraban cuando veían al tal Edward en la pantalla! Y contando a Celia. Él podía ser mucho mejor que ese estu.pido vampiro chupa sangre. Bufó.

-¿Puedes dejar de quejarte?- le preguntó ella ya que él suspiraba con fastidio a cada rato y se removía en el asiento. Justin la miró. Solo la luz de la pantalla iluminaba su precioso rostro.

-¿Y tú podrías dejar de babosearte por Edward?- Espetó, molesto. La chica sonrió levemente. ¿Estaba celoso por Edward? Realmente tenía muchas ganas de reírse.

-No lo hago.- Negó ella.

-Si, claro.- Soltó con sarcasmo.

-No lo hago por Edward, prefiero a Jacob.- Confesó para hacerlo enojar más y se metió una palomita de maíz a la boca.

-¿No me prefieres a mí?

-No, solo que como no tengo a Jacob aquí, tengo que conformarme contigo.- Él abrió los ojos bien grandes y frunció el ceño.

-Entonces vete con él.- Justin se levantó del asiento, dispuesto a irse pero ella lo jaló del brazo para que volviera a sentarse cuando escuchó que la gente lo insultaba para que se sentara porque les tapaba la visión. Lo miró con diversión. ¿En serio iba a irse porque le dijo que se baboseaba por Jacob?

-¿Es en serio? ¿Estas molesto?- le preguntó con incredulidad y a la vez queriendo reírse. Justin agitó los hombros con molestia sin mirarla, solo estaba con la vista en la gran pantalla. Ella rió por lo bajo para que la gente no la escuchara. Inclinó su cuerpo hacia un costado y estiró su cuello para depositar un pequeño beso en la mejilla de él.

-Déjame, Celia.- dijo en tono firme pero ella no le hizo caso y dio otros besos más en la mejilla. Todos seguidos y cortitos. Como vio que no funcionaba, bajó sus labios por su cuello y mordió un poco de su piel. Escuchó un gemido ahogado de Justin.

-No estés enojado.- le pidió con voz suplicante. Justin asintió hipnotizado por su voz ¿Cómo podía enojarse cuando le pedía las cosas de esa forma?

-¿Por qué no besas a Jacob si tantas ganas le tienes?- preguntó él. Ella sonrió con malicia.

-Ya te lo dije, porque él no está aquí.- respondió con facilidad sabiendo que Justin se molestaría aún más. Y eso hizo. Se separó de ella con enojo y volvió a levantarse de su asiento. Celia lo imitó después de haber apoyado el recipiente de palomitas de maíz en su asiento y se levantó para jalarlo del brazo y evitar que se fuera.

-¡Siéntate inu.til!- Le gritó a Justin un tipo de los que estaban sentados más arriba. Él dirigió la vista hacia donde provenía el grito del tipo y apretó la mandíbula.

-¡Cállate gili.pollas!- Le gritó con enojo. La chica agarró su barbilla y corrió esta para que su mirada se posara en ella. Besó sus labios con suavidad.

-¡Consíganse un hotel!- Volvieron a gritar. Justin se separó bruscamente y volvió a dirigir la mirada de donde venía el grito.

-¡Te patearé el cu.lo, ca.bron!- Dijo cabrea.do y estaba decidido a ir a buscar al tipo que había gritado, pero una voz los detuvo.

-Les voy a pedir por favor que se retiren de la sala.- Les pidió un chico con una remera que tenía el nombre del cetro comercial. Era un empleado de allí. Celia asintió.

-Justin...- la agarró del brazo para que dejara de mirar asesinamente al tipo.- vamos...- lo hizo caminar casi arrastrándolo y salieron de la sala de cine. Se giró para verlo. Él tenía una expresión de enojo.- Hey, ya deja de estar enojado.- le pidió. Justin tiró su brazo hacia abajo para que lo soltara y sin siquiera mirarla, se dio media vuelta, dirigiéndose a un banco. Ella frunció el ceño.- ¿Puedes dejar de ignorarme?- Se acercó a él y se sentó a su lado en el banco.

Justin no le contesto, siguió ignorándola.

-Oh, perfecto.- Soltó con ironía. Miró al frente y observó la gente que pasaba por el comercial. Suspiró.- En realidad te prefiero mil veces a ti antes que a Jacob.- Habló después de unos minutos. Él se dignó a mirarla.- En serio te lo digo, solo quería que te molestaras un poco, no que terminaras por agarrarte a piñas con uno de los que estaba allí.- Lo miró algo apenada. Justin observó su rostro angelical pidiéndole disculpas y todo el enojo que tenía se desvaneció mágicamente. Ella era el antídoto que lo calmaba. Acaricio su mejilla con su largo dedo índice. Sus bocas estaban a pocos centímetros en menos de lo que se dieron cuenta.

-¿Por qué eres tan hermosa?- le preguntó de repente, relajando las facciones de su rostro y mirándola tiernamente. Ella sonrió y saltó interiormente al saber que ya no estaba enojado.

-No lo sé, no lo puedo evitar.- dijo en broma con tono presumido. Él dejo escapar una risa desde el fondo de su garganta pero luego dejo de reír, para volver a ponerse serio.

-Me molesto mucho saber que preferías a ese sucio lobo antes que a mi.- dijo, molesto. Ahora fue ella quien rio.

-Amo cuando te pones celoso...

-No lo estoy.

-Lo estabas.

-No.- Mintió. Ella lo miro acusadoramente.- Esta bien, quizás solo un poco.- Terminó confesando.- Pero no me juzgues... solamente cuido lo que es mío, gatita...- Su vista se clavó en los labios de Celia y su boca se hizo agua. Quería besarla y hacerle saber que era suya, que nadie podía tenerla si no era él. Ni Jacob, ni cualquier otro gili.pollas que anduviera merodeando por ahí. Solo de él. La mano que estaba abajo, se posicionó sobre la pequeña cintura de ella y la atrajo un poco a su cuerpo.

Juntó su boca contra la de ella, chocándose con su sonrisa, por lo que dejó de sonreír y estiró los labios para unirlos aún más. Comenzaron a moverlos. Un ritmo despacio, suave... un ritmo perfecto. Él delineó sus labios con su lengua para que luego abriera más la boca y así pudo introducir esta. Ella también hizo que su miembro bucal reaccionara, haciendo que ambas lenguas se rozaran sutilmente en el beso. Subió su mano y la apoyo en la mejilla de Justin sin dejar de besarlo, empujó su cabeza aún más para profundizar el beso. Escuchó un jadeo de parte de él. Se separaron lentamente. Ella Pudo ver que él se relamía sus propios labios y dejaba estos brillosos.

-¿Quieres ir a comer algo?- le preguntó Justin luego de unos minutos de apreciar el bonito color de sus cojos color verde esmeralda.

-Como quieras, aunque no tengo hambre.

-Bueno, pero yo si tengo y mucha.- Anunció con una sonrisa y jaló del brazo de ella para que lo siguiera hasta el lugar de comida rápida que había en aquel centro comercial.

Without control 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora