Capítulo 5

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"Vete, escóndete ahí. No vengas hasta que yo te diga" Me dice.

"¡No! ¿Dónde te vas a esconder tu? ¿No hay suficiente espacio aquí para ti también?" digo llorando. No quiero ser la patética que se esconde.

"Hunter, métete ahí ahora mismo, yo estaré bien. No salgas hasta que yo te diga, ¿vale?" me pregunta

"De acuerdo" digo.

"¿Lo prometes?" me pregunta, mirándome directamente a los ojos.

"Sí, lo prometo": Le digo, y me meto en el pequeño armario, apenas quepo dentro yo sola, no hay manera posible en la que ella pudiera entrar aquí también.

Mi corazón late a mil por hora y el sudor corre por mi frente. Estoy llorando y temblando en silencio. Honestamente no tengo ni idea de qué hacer ahora mismo. Mi cabeza da vueltas y no puedo pensar con claridad. Sé que ella está asustada en este momento, probablemente pasando un mal trago intentado sacarnos de aquí. Puedo decir que está asustada y llorando también por los pequeños sollozos que salen por su boca.

¿Por qué no soy la que está fuera defendiéndola? ¿Por qué me defiende ella? No puedo dejar que se arriesgue por mi. Justo cuando estoy a punto de salir del armario y tratar de convencerla de que se meta ella, la puerta se abre y alguien entra.

++++++

Me levanto de golpe con la espalda tensa y la frente empapada. Mi corazón aún sigue latiendo anormalmente rápido, y mi respiración también está acelerada.  He estado teniendo pesadillas bastante frecuentemente en los últimos meses. Me impiden descansar como debería. Las odio tantísimo. Solo traen de vuelta ese día, los recuerdos vuelven nítidamente a mi cabeza.

Cojo mi móvil para comprobar la hora. Son las seis y media, cinco minutos antes de que la alarma suene. Probablemente sea mucho mejor si salgo de la cama ahora, en vez de arriesgarme en dormirme y tener una pesadilla de nuevo. Estas pesadillas me consumen, hacen que quiera que el mundo se detenga para solo acurrucarme en mi cama durante el resto de mi vida.

Aún está oscuro fuera cuando salgo de la ducha. ¿Por qué? Aún es prácticamente verano. El agua caliente se siente tan bien por mi tenso cuerpo. Los pequeños puntos de tensión se desvanecen rápidamente cuando el agua llega hasta ellos. Agarro el champú con esencia de vainilla y me lavo el pelo, masajeando el cuero cabelludo al mismo tiempo.

Una vez salgo de la ducha y me desenredo el pelo, me lavo los dientes. Nunca utilizo maquillaje, tengo la piel bastante cuidada y no tengo ojeras, así que realmente no lo necesito, supongo. Me visto y bajo las escaleras para desayunar. Mi padre ya se ha marchado al trabajo, pero por fortuna me lo ha dejado preparado sobre la encimera. Una tortita y huevos revueltos.

Cojo algo de zumo de naranja y ketchup de la nevera. Hay suficiente zumo para un vaso. Escuro algo del ketchup sobre los huevos y echo algo de sirope a la tortita. Mi padre me llama rara por poner ketchup a los huevos, pero no soy capaz a comerlos a menos que tengan ketchup por todas partes.

La casa se siente vacía, odio esta sensación. Me hace sentir que no hay nadie viviendo aquí, y honestamente me da miedo que estemos en medio de la nada. Además de añadir el hecho de que estoy aquí, sola, y es viernes 13, el segundo día que más odio del año. Siento como si alguien estuviera esperando para generar el caos.

Me siento en la mesa con mi desayuno y comienzo a comer en silencio. Mi padre no tiene realmente mucha idea de cocinar, así que la tortilla está algo pasada y falta de sabor. Al menos con el sirope puedo darle algo de gustillo.

Después de comer y colocar los platos en el fregadero me dirijo hacia afuera. En cuanto cruzo la puerta me pego mentalmente a mi misma. Dejé mi coche en el bar ayer de noche, ¿cómo se supone que voy a ir al colegio? En el momento que me iba a girar para volver dentro, un 4x4 negro aparece en la calzada y aparca en frente de mi.

Poison - H.S [Español]Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu