XXXIX "Mi declaración de amor" (Parte 2/2)

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Ya habían terminado las clases, y Taro se dirigía a su casillero, pero aun no iba a salir del instituto.

Cuando abrió su casillero, un papel color rosa doblado por la mitad se cayó de ahí. Taro lo levantó y abrió la nota.

Senpai

Te espero en el árbol del cerezo detrás de la escuela a las 6 de la tarde. Por favor, necesito que vengas. Es algo muy importante para mí.

Ayano

Taro no pudo evitar sonrojarse por la ternura de la chica. Aun sabiendo que sus sentimientos eran correspondidos, en la nota parecía que aun tuviera cierto temor.

"Esto también es muy importante para mí, Yan-chan"- pensaba Taro con una sonrisa.

Miró la hora. Aun faltaba bastante para las 6. Trataba de contenerse de ir a buscar a Ayano, decirle cuanto la amaba y besarla con toda la lujuria posible, pero debía de ser paciente. Entonces se decidió a buscar a Budo, por lo menos para ver como él y sus discípulos entrenaban y así hacer tiempo hasta que sea la hora que Ayano le había indicado.

Llegó al club de artes marciales, y vio a dos estudiantes simulando un combate. Pidió permiso antes de entrar, y todos pararon su entrenamiento para saludarlo.

-Taro, ¿Qué haces aquí?- preguntó Budo algo confundido.

-Quería ver cómo iban sus prácticas ¿Está mal?- respondió Taro simpático.

-N-no, solo que es raro verte eh...

-Si, es que Ayano me pidió vernos a las 6, pero aun es bastante temprano para...

-¿Ayano?- interrumpió Juku- ¿No es la chica que había venido aquí el otro día?- preguntó, y los demás miembros del club (claro, a excepción de Budo) asintieron.

Taro se le quedó viendo a Budo algo sorprendido por eso.

-Ya están atrasados- los regañó Budo- sigan con el calentamiento.- dijo rápido y con voz potente, a lo que los demás obedecieron con algo de miedo a su líder.- Taro em...¿P-por qué no te sientas? Después de todo viniste para ver cómo funciona el club ¿No?- le mencionó a Taro aun con algo de nervios.

Taro, algo confundido, se sentó a un costado del club, recostado en la pared.

"Ayano...¿Qué estarás haciendo ahora?"

[...]

Mientras tanto, Ayano se encontraba en el club de jardinería, arrastrando el cuerpo de Mai Waifu a la trituradora.

Tenía la suerte de contar con Info-chan, puesto que ella tenía acceso, entre otras cosas, a las cámaras de seguridad, y pudo avisarle a Ayano que esa chica la había visto besándose con el líder del club de artes marciales en la azotea, y no iba a dudar ni un instante en contarle ese chisme a Taro.

No quiso correr riesgos, así que la asesinó luego de terminar su hora de clases, de manera que nadie escuchara sus gritos y pedidos de auxilios. Fue una muerte rápida, cosa que no le gustó a Ayano, ya que ella también buscaba separarla de su senpai, no con motivos amorosos, pero de todas maneras hubiera querido hacerla sufrir.

Metió todos los restos sobrantes de la joven en una bolsa, y se la llevó con ella a los vestuarios. De esa manera, podría bañarse para quitarse todo rastro de sangre y luego ir al incinerador a desechar esos restos junto con su ropa ensangrentada y el cuchillo que había utilizado.

No tardó mucho en realizar ese trabajo, pero aun faltaba media hora para encontrarse con senpai, así que se dirigió a su casillero, y dedicó ese tiempo a arreglarse para él. Se dejó el cabello suelto, se aplicó delineador para resaltar sus ojos, se pintó los labios con un brillo suave, y se colocó un poco de rubor en sus mejillas, aunque esto último no hiciese falta, puesto a que de seguro se sonrojaría naturalmente al estar en frente del muchacho que ama.

Te Necesito [Yandere Simulator]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora