Te Necesito [Yandere Simulator]

XLVII "Reconciliación"

-A-ayano...- titubeaba Taro, muy incómodo. La chica sonrió ante el nerviosismo de su novio.

Ayano se separó un poco de Taro para poder levantarse del sofá, dándole la espalda, dejándolo muy confundido. ¿Se había arrepentido de sus palabras?

Esa suposición de Taro fue desmentida al ver a Ayano retirándose la camisa de él y tirándola al piso, quedando ahora completamente en ropa interior. Taro tragó saliva ante eso, muy sonrojado, y con la temperatura de su cuerpo subiendo más y más, y eso que solo estaba viendo a Ayano aun de espaldas. Cuando ella se dio la vuelta para tenerlo de frente, fue imposible para él no "escanearla" con la mirada.

-Senpai...- lo llamó Ayano mientras deshacía su peinado de una coleta, dejando caer su cabello por sobre sus hombros de una forma muy sensual.

Taro la miró a los ojos, hasta que Ayano le extendió una mano, como si lo invitara a algo. Él, muy embobado por la situación pero más que nada por ver a Ayano así, fue casi de forma inconsciente que él la tomó de la mano, para levantarse y ser guiado por su novia hasta su respectiva habitación.

Antes de abrir la puerta de su cuarto para entrar, Taro la tomó de la cintura y la pegó a la misma, mientras besaba su cuello dulcemente, pero bastante excitado, al igual que ella, que en respuesta suspiraba muy placenteramente, y con una mano palpando la puerta buscando la perilla para por fin abrirla.

"El...santuario"

- Espera- pidió Ayano con la voz agitada.

-Lo... lamento Yan-chan. Si te sientes incómoda...

-Mejor aquí- sin prestar atención a lo que Senpai estaba diciéndole, Ayano fue hacia otra habitación, ingresando en ella.

Taro la siguió, y vio a Ayano sentada en el centro de aquella cama matrimonial, con una pícara sonrisa en su rostro.

Ignorando el hecho de que era la habitación de los padres de su novia, Taro se acercó a ella dejándola recostada en la cama, y dándole un profundo beso. Ella acariciaba la espalda de su novio mientras seguían besándose.

Ayano pudo sentir que a medida que Taro acariciaba sus caderas, sus manos temblaban, como si la situación lo hiciera sentir de alguna manera inseguro, además de que no habia tocado otras partes de su cuerpo.

-Senpai...tu confías en mi ¿Verdad?

Taro detuvo lo que estaba haciendo y la miró con una sonrisa.

-Por supuesto que si linda ¿Qué pregunta es es...?

-Te noto extraño ¿Me equivoco?- preguntó con un claro gesto de "te descubrí".

-Eh...e-entiende que...bueno...- Taro se sonrojó intentando darle una respuesta. Ayano lo miró con ojos tiernos.

Continuó besando su cuello para que Ayano no lo viera nervioso, aunque ya era algo inútil. Despues de todo, ella lo conoce muy bien.

-no he hecho esto... antes.- continuó.

Ayano sonrió.

-Ósea que...- no la dejó continuar ya que Taro pasó su mano por la entrepierna de ella, haciendo que diera un inesperado jadeo por solo tocarla cerca de su intimidad.

- Ser... "inexperto" no significa que no te haré sentir bien Yan-chan.

Dicho eso, Taro comenzó a bajar un poco hasta llegar a sus pechos, besándolos aun sobre el brasier, mientras que con su mano masajeaba lentamente la parte intima de la muchacha, a lo que ella respondía con gemidos lujuriosos, arqueando su espalda ante todas las sensaciones por las que pasaba su cuerpo en ese momento. Él luego pasó a concentrarse solo en los senos de Ayano, desabrochando su brasier para que ya no estorbase y poder jugar un poco.